La gestión de Pedro Pablo Barrios al frente de la Real Federación Española de Piragüismo (RFEP) se someterá a una moción de censura que ha recibido el visto bueno de la Junta Electoral y en la que el piragüismo balear se ha posicionado dentro del sector crítico con el actual mandatario del organismo y su equipo directivo. De hecho, la Federación Balear de Piragüismo es una de las siete territoriales que apoya este voto de censura -junto a Galicia, Asturias, Madrid, País Vasco, Cantabria y Ceuta-, refrendado por un total de 36 asambleístas, varios de ellos del archipiélago, para un total de 20 clubes, 9 deportistas y 7 federaciones territoriales que ponen en cuestión la labor de la actual junta directiva de la RFEP, que inició meses atrás su primer mandato.
El número de voces críticas dentro de la Asamblea ha crecido respecto a anteriores movimientos, que llevaron a acumular una serie de denuncias relacionadas con el pasado proceso electoral, y que encabezados las federaciones de Galicia, Asturias y Balears.
Los impulsores de la moción de censura, que debería desarrollarse como tarde antes de que acabe el próximo mes de noviembre, proponen como candidato a la presidencia de la Federación Española al expiragüista olímpico e internacional Javier Hernanz, que pugnó por el cargo con Barrios, perdiendo por un mínimo margen. Ahora, con el apoyo de un importante sector del piragüismo español, abandera la moción de censura, validada por la Junta Electoral de la RFEP el pasado martes 5 de octubre, y en la que Balears y su territorial se han posicionado como algunos de sus principales impulsores, disconformes con la manera de actuar del actual presidente.