Los atletas rusos Andrei Silnov y Natalya Antyukh, ambos campeones olímpicos, son dos de los cuatro rusos contra quienes la Unidad de Integridad del Atletismo ha presentado cargos por infracciones de dopaje.
Silnov, que obtuvo la medalla de oro en salto de altura en Pekín 2008, y Antyukh, campeona olímpica de 400 m vallas en Londres 2012, han sido acusados tras la investigación que la Agencia Mundial Antidopaje realizó sobre el atletismo ruso bajo la dirección del abogado canadiense Richard McLaren.
El exsaltador de altura, acusado de utilizar productos prohibidos, era vicepresidente de la Federación Rusa de Atletismo hasta el pasado mes de junio tuvo que renunciar al cargo tras un expediente abierto por la Unidad de Integridad del Atletismo.
Los otros dos atletas acusados de dopaje son Yelena Sobolova, subcampeona mundial de 1.500 en pista cubierta en 2006 y con antecedentes de manipulación de pruebas, y la lanzadora de martillo Oksana Kondratyeva, también retirada ya.
Los cargos contra los cuatro atletas serán presentados ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS), que aún no ha fijado una fecha para examinar el caso debido a la pandemia del coronavirus.