La selección alemana de ciclismo, que se encontraba concentrada en Mallorca estos días, más concretamente en Alcúdia, tuvo que abandonar de manera precipitada la Isla a consecuencia de la celeridad de los acontecimientos derivados de la crisis del coronavirus.
Cerca de un centenar de corredores y técnicos realizaban un stage en la Isla, y ante las medidas que se iban a tomar en España y el crecimiento exponencial de casos, optaron por acelerar su marcha. Para ello fletaron autocares con destino a Son Sant Joan y se logró contratar un chárter con destino al aeropuerto berlinés de Schönefeld.
«Lo primero era la salud de los deportistas, el personal y sus familias. Por ello, decidimos cancelar el 'Trainning Camp'», aseguraba el director deportivo de la Federación Alemana de Ciclismo (BDR), Patrick Moster. De la misma manera, dejó claro que tras evaluar «las recomendaciones de las autoridades competentes en salud, decidimos tomar esta medida», añadió.
«Lamentamos el fin del stage, pero todos han comprendido nuestra decisión», reseñó Moster, que agradeció la profesionalidad y celeridad con la que se programó la salida del casi centenar de integrantes de la expedición. «Especialmente a Karl Gladeck, del Team Sportreisen, y al médico del equipo, Denis Biro, que se encargó de coordinarlo todo», dijo.
A última hora del viernes, al filo de la medianoche, el vuelo que repatriaba a la selección alemana de ciclismo despegaba desde Son Sant Joan poniendo fin a unas intensas horas de gestiones e incertidumbre dentro del grupo de corredores, sus responsables técnicos y el personal de la BDR.