A partir de mañana la piscina municipal de Inca pasará a llamarse Catalina Corró y la gran protagonista del día aún asimila un reconocimiento que la llena de orgullo y agradecimiento. La nadadora del Club Natació Sabadell tiene previsto regresar a Mallorca procedente de Barcelona para participar del acto oficial que tendrá lugar en la capital de es raiguer y lo hará abriendo un paréntesis en su preparación y sus estudios de medicina.
Multimedallista en los Nacionales y finalista en el pasado Mundial de piscina corta en China, Catalina Corró recibe el homenaje de su ciudad en un momento personal complejo, ya que en apenas unos días tendrá que pasar por el quirófano en Palma. Después de ser operada de un tumor cerebral en 2017, la tienen que volver a operar de un tumor cerebral. «Algo de mi cerebro no está bien y está sufriendo», explicó a principios de mes generando multitud de apoyos en el mundo del deporte. Mañana en Inca, con los suyos, tendrá motivos para lucir su mejor sonrisa.
-Piscina Municipal Catalina Corró ¿cómo le suena?.
-Todavía me estoy haciendo a la idea. El año pasado en verano ya me informaron de que se iba a votar la propuesta y que posteriormente salió por unanimidad lo de ponerle mi nombre a la piscina, pero realmente no me avisaron hasta hace dos semanas que el acto se celebraría este miércoles y lo estoy asimilando aún.
-¿Qué sensación le produce?
-La verdad es que al principio me dio un poco de vergüenza pensar que iba a tener una piscina a mi nombre. Después pienso que en el futuro pueda ir siendo yo siendo mayor a la piscina o con mis hijos y creo que es un orgullo que nunca se acabará.
-¿A quién le quiere dar las gracias?
-A la ciudad y al ayuntamiento porque me he sentido muy apoyada por todos y siempre se han encargado de darle una gran importancia y mucha repercusión a las cosas que he ido haciendo a lo largo de mi carrera. También se lo tengo que agradecer a todos y cada uno de los entrenadores que he tenido desde que empecé en Inca y a los que luego tuve en la Escola Balear de l'Esport, en el Centro de Alto Rendimiento de Sant Cugat y en el Sabadell. Y por supuesto a mi familia, que es muy importante para mí.
-¿Tener una piscina a su nombre le hace más ilusión a usted o a la familia?
-Creo que a ellos (risas). Todos están muy contentos y en estos momentos me acuerdo mucho de mi abuelo (Miquel Corró) que falleció y hubiera estado muy orgulloso. Estoy convencida de que hubiera ido cada día a ver la placa de la piscina.
-Debe ser un lugar de muchos recuerdos...
-Sí, porque empecé en la antigua del Sport Inca y luego nos cambiaron allí, así que he estado entrenando allí desde muy pequeña.
-Se hace raro pensar que una deportista en activo tenga una instalación a su nombre
-Sí, un poco sí. Todavía me tengo que retirar y aún tengo cuerda.
-Está en plena cuenta atrás para volver a pasar por el quirófano ¿cómo se encuentra?
-Ahora estoy en un momento en el que las emociones me salen más rápido.
-Si lo consiguió una vez puede lograrlo de nuevo...
-Esperemos que sí, yo me tomo la operación como la otra y confiando en que la recuperación sea algo más llevadera y que vaya lo mejor posible.
-Después de su primera intervención no sólo fue capaz de volver a competir sino que regresó dominando a nivel nacional y cosechando grandes resultados en las pruebas internacionales
-Cuando salía a competir fuera era muy importante para mí poder estar con el equipo español y lo cierto es que cada vez me sorprendía un poco más. Esta vez trabajaré igual o aún más si cabe para volver a la competición.
-¿Cómo ha sido su relación con los entrenamientos desde que supo que la tenían que operar de nuevo?
-Hacía unos diez días que había vuelto a entrenar cuando me lo comunicaron y seguí con los entrenamientos, pero cuesta seguir con la rutina porque pasas algunos días difíciles.