Jaume Munar, que avanzó este martes a la segunda ronda del Abierto de Río de Janeiro tras vencer por 7-6 (5) y 6-4 al argentino Leonardo Mayer, aseguró que no se ha puesto ninguna meta en este torneo, en el que debuta.
«No tengo ninguna expectativa. No me he impuesto ninguna meta en el ATP 500 de Río de Janeiro. Sé que el cuadro es complicado y me gusta ir partido a partido», afirmó Jaume Munar, número 66 en la clasificación mundial de la ATP, tras su victoria.
«Soy muy joven aún y no tengo por qué imponerme metas por ahora», agregó el mallorquín de 21 años y formado en la academia de Rafael Nadal en Mallorca.
Munar también negó que se sienta presionado a lograr buenos resultados por su relación con Rafael Nadal.
«No hay presión. Rafael Nadal es un compañero de trabajo. Lo único que tenemos de parecido es que soy mallorquín. Estoy lejos de lo que él representa para el tenis», aseguró el joven español tras recordar el nerviosismo que sintió cuando tuvo que enfrentarse en un partido oficial a Nadal en Hamburgo en 2015.
Jaume Munar admitió que ser compañero de Rafael Nadal constituye una ventaja debido a lo mucho que él tiene para enseñarle sobre cómo funciona el circuito, pero negó que el actual número 2 del mundo le hubiese dado recomendaciones sobre la competición de Río de Janeiro, de la que fue su primer campeón, en 2014.
«No me ha pasado ninguna recomendación para este torneo en especial pese a que Rafael es un punto de apoyo en mi carrera. Comparto mucho tiempo con él y le agradezco por su compañerismo y por todo lo que me ha enseñado», destacó.
Pese a afirmar que no se impuso ninguna meta específica para Río ni para su actual temporada, agregó, que, a largo plazo, sí tiene muchos objetivos, entre los cuales está sumar títulos en los torneos de la ATP.
«Entre otras cosas me encantaría terminar este año entre los 50 mejores de la clasificación y avanzar lo máximo posible en el ránking. Para mí lo más importante es ir subiendo posiciones cada año y ser cada vez más un mejor jugador», aseguró.
En la siguiente ronda del torneo, Jaume Munar tendrá que medirse a Cameron Norrie (62), que obtuvo una incontestable victoria por 6-2 y 6-1 sobre el serbio Dusan Lajovic (43), por lo que admitió que será un partido complicado.
«Cualquier partido en este torneo es complicado por la calidad del cuadro principal, pero me siento muy bien porque llevo meses trabajando para esto», dijo.
Los máximos favoritos al título de la sexta edición del Abierto de Río son el austríaco Dominic Thiem, octavo en la clasificación ATP y que ganó el torneo en 2017, los italianos Fabio Fognini (13) y Marco Cecchinato (18), y el argentino Diego Schwartzman (19), campeón del año pasado.
Además de Schwartzman (2018), Thiem (2017) y Nadal (2014), los otros campeones en Río han sido el uruguayo Pablo Cuevas (2016) y el también David Ferrer (2015).
El torneo brasileño se disputará hasta el próximo domingo en las canchas de tierra batida del Jockey Club Brasileño y otorga al campeón un premio de 369.000 dólares y 500 puntos ATP, y al otro finalista 185.325 dólares y 300 puntos ATP.