La Fundació per a l'Esport Balear ha puesto en práctica una medida tan innovadora como generadora de debate entre un sector de sus trabajadores.
La entidad vinculada a la Conselleria de Cultura, Participació i Esports del Govern ha instado a su personal técnico -principalmente relacionado con los programas de tecnificación, y en algunos casos de otras áreas- a instalar en sus teléfonos móviles una aplicación a través de la cual poder fichar en el momento de iniciar y finalizar su jornada de trabajo. La particularidad de algunos de esos puestos, en los que la movilidad es regular o constante, implica que se puede realizar ese proceso desde el lugar en el que se esté entrenando o compitiendo, o bien desempeñando las funciones que les corresponden en su horario laboral. De esta manera, se ofrece una alternativa a la práctica habitual del personal administrativo, que ficha presencialmente cada día en su puesto de trabajo.
El foco de la polémica reside en la geolocalización que lleva consigo esta aplicación, en fase de pruebas, durante la conexión vinculada a su turno de trabajo, con lo que desde la Fundació se pretende saber en qué lugar se encuentran esos trabajadores, que de ella dependen, en ese espacio de tiempo. Esta medida no acaba de convencer a una parte de los afectados (el personal al que implica ronda el medio centenar de personas), algunos de los cuales ya tienen instalada la polémica aplicación, o todavía tienen que pasar por las oficinas de la Fundació para ese fin. Desde este sector se lamenta la falta de información recibida por parte de sus superiores al respecto al funcionamiento y objetivos de la aplicación y su proceso de puesta en marcha, lo que provocado una situación de tensión que apunta todas las críticas hacia la gerencia de la Fundació.
La Associació de Tècnics Esportius d'Alt Rendiment i Tecnificació de les Illes (ATARTIB) tiene la intención de solicitar una reunión con el gerente de la Fundació, Pep Abrines, sin dejar de lado otras acciones o encuentros a través del comité de empresa u organizaciones sindicales.
La puesta en marcha de esta aplicación móvil, justificada desde la gerencia como una medida legal para poder conocer, controlar y tener más información sobre los horarios y turnos de ese grupo de trabajadores con unas necesidades especiales, ha provocado incluso discrepancias en algunos sectores de la propia Conselleria, que supieron de la introducción del uso de esta herramienta a través de los propios trabajadores implicados y, al conocer la situación, han mostrado su preocupación por la forma en qué se ha implantado esta medida.
La misma se toma para controlar las horas de trabajo y la localización de los técnicos durante su turno, toda vez que se buscaba una forma con la que tener información veraz sobre el cumplimiento de las horas estipuladas por contrato y la presencia en su puesto de trabajo de alguno o alguno de los mismos, y de paso poder responder a las peticiones que Trabajo pudiera realizar en una posible inspección, más cuando en la Fundación existen diferentes perfiles de contratación.
El hecho de que algunos de los programas de tecnificación a los que da cobijo la Fundació per a l'Esport Balear desarrollen parte de su actividad fuera de las instalaciones del polideportivo Príncipes de España y que muchos de los técnicos se desplacen a competiciones hace que la localización laboral y sus horarios se sitúen en muchas ocasiones fuera de la instalación del Polígono de Son Castelló, e incluso con ello la cantidad de horas de trabajo real aumente de forma considerable cuando hay desplazamientos a la Península, o incluso al extranjero, de por medio.
El control a través del teléfono móvil que quiere ejercer la Fundació per a l'Esport Balear hacia su personal técnico, principalmente el relacionado con sus programas de tecnificación (más de una veintena actualmente en marcha), pero especialmente la ausencia de información al respecto, han abierto otro foco de conflicto en esta entidad dentro de una legislatura convulsa en el seno de la Conselleria que encabeza Fanny Tur.