Han pasado 208 días desde aquell fatídico prólogo del Tour de Francia. Desde aquella dura caída que dejó fuera de carrera a un Alejandro Valverde que ha firmado una recuperación de récord para estar este jueves, un año más, en la línea de salida de la Playa de Palma Challenge Ciclista a Mallorca. El murciano lidera al Movistar en la Isla. Una escuadra con la que Mikel Landa lucirá por primera vez en ruta el maillot de la escuadra telefónica, llamada a animar una cita que contará con quince equipos en liza, cinco de ellos del UCI World Tour (el citado Movistar, Sky, Bora Hansgrohe, Lotto-Soudal y Trek-Segafredo).
Es la primera pista de pruebas en Europa de la nueva normativa de seguridad, que reduce a siete los corredores por equipo en la Challenge, que arranca con el Trofeo Campos-Porrerese-Felanitx-Ses Salines.
Una jornada en la que Valverde ha sido el epicentro de todas las miradas, pero en la que otros ilustres del pelotón pujarán por el triunfo en la primera prueba de ruta en suelo europeo.
José Joaquín Rojas, Daniele Bennati, Andrey Amador, Matthias Brändle, John Degenkolb, Markel Irizar, Gregory Rast, Gianni Moscon, el siempre combativo Tim Wellens (ganador de dos pruebas en 2017) o los baleares Albert Torres y Xavi Cañellas, enrolados en la selección española de pista, serán algunos de los nombres propios de la primera jornada de la Playa de Palma Challenge Ciclista a Mallorca, que alcanza su edición número veintisiete.