El ciclista australiano Michael Matthews (Sunweb) ha logrado el triunfo en la decimosexta etapa del Tour de Francia, un recorrido de 165 kilómetros entre Le Puy-en-Velay y Romans-sur-Isère en el que Alberto Contador (Trek-Segafredo) ha vuelto a perder tiempo, concretamente 1:33 frente a los cuatro primeros clasificados cuya llegada a sido conjunta.
Un poco más descansado tras el día de reposo, parecía que el pelotón se tomaría con calma la última etapa antes de la dos jornadas decisivas en los Alpes, pero dos pequeños puertos en la primera mitad del día, Cote de Boussoulet (3ª) y Col du Rouvey (4ª), y los fuertes vientos que provocaron cortes posteriormente, volvieron a agitar los nervios de los ciclistas.
A falta de 15 kilómetros para la meta y con una cuarentena de ciclistas ya descolgados del pelotón, Chris Froome (Sky) sacó galones y puso a su equipo a tirar con fuerza, buscando un abanico que a punto estuvo de pillar desprevenidos a sus dos principales perseguidores, Fabio Aru (Astana) y Romain Bardet (AG2R La Mondiale).
No sin esfuerzo, tanto el italiano como el francés lograron superar el susto, no así Alberto Contador, que volvió a anclarse y acabó perdiendo más de un minuto y medio en meta. De esta forma, el madrileño sale del 'Top 10' de la clasificación general para colocarse undécimo a 7:10 del maillot amarillo. El otro damnificado del día fue Daniel Martin (Quick-Step), que perdió 51 segundos y ahora es séptimo a 2:03 de Froome.
De hecho, tan solo 22 ciclistas llegaron juntos para disputar un descocado sprint por las calles de Le Puy-en-Velay, donde todas las miradas se volvieron hacia tres especialistas como Matthews, Edvald Boasson Hagen (Dimension Data) y John Degenkolb (Trek-Segafredo), que fue el primero en arrancar.
El alemán parecía tener el triunfo asegurado, pero los metros finales se le hicieron largos y fueron Matthews y Boasson Hagen los que acabaron disputándose el triunfo. Tres días después de sumar en Rodez la primera victoria de su carrera en el Tour, el de Canberra volvía a imponerse para sellar su doblete.
Este miércoles, la carrera entrará en su fase decisiva con la disputa de la imponente decimoséptima etapa, en la que se subirán un total de cuatro puertos: Oron (2ª), la Croix de Fer (categoría especial), Telegraphe (1ª) y Galibier (categoría especial), este último a 28 kilómetros de la meta, situada en Serre-Chevalier.