El holandés Bert Jan Lindeman (Lotto Junbo) se impuso este viernes en solitario en la séptima etapa de la Vuelta disputada entre Jódar y el Alto de Capileira (Granada), de 191 kilómetros, en la que el colombiano Esteban Chaves (Orica) mantuvo el liderato.
Lindeman, que invirtió un tiempo de 5h.10.24, hizo buena la escapada del día y logró estrenar su palmarés en una prueba grande. Atacó a 500 metros de meta y superó en 9 segundos al bielorruso Ilia Koshevoy (Lampre) y en 29 al italiano Fabio Aru (Astana).
A 36 segundos cruzaron la meta Alejandro Valverde, Nairo Quintana y Purito Rodríguez, mientras que el británico Chris Froome cedió en la subida y perdió 27 segundos en meta respecto a sus rivales directos de la general.
Chaves aguantó entre los grandes y sigue al frente de la general con 10 segundos sobre Dumoulin y 33 respecto a Daniel Martin. Fabio Aru subió al octavo puesto y Froome se descolgó a la duodécima plaza a 1,22 del líder y 25 segundos de Valverde, Purito y Quintana.
Una jornada de intenso calor, con el termómetro en los 37 grados en algunos momentos, un verdadero martirio para un pelotón que no reaccionó cuando salieron disparados de salida Txurruka (Caja Rural), Quintero (Colombia), Koshevoy (Lampre), Cousin (Europcar) y Lindeman (Lotto Jumbo).
Escapada que olía a éxito, pues las diferencias fueron aumentando hasta los 13 minutos al paso por Granada, a 75 de meta. El Orica del líder no asumió el mando de la captura, y los demás miraron hacia otro lado, en espera de los últimos 18 kilómetros de ascenso a Capileira. El calor aplacó los ánimos a los perseguidores.
Pero la carretera se puso cuesta arriba camino de la localidad de la Alpujarra y la película prevista peligró. El Movistar tomó el mando en la aproximación a Capileira y redujo la ventaja a 4 minutos a pie de puerto. El Katusha echó una mano, al igual que el Astana, con Luis León Sánchez poniendo al grupo en fila india.
La batalla entre los grandes «gallos» de la general había empezado, y eso fue la ruina para Amets Txurruka, aunque hubo quien se rebeló. El bielorruso Ilia Koshevoy se la jugó a 5 de meta, luego se le unió el francés Jerome Cousin y completó el trío el holandés Bert Jan Lindeman.
Fue Lindeman quien aguantó todos los intentos de despegue, hasta que se quedó mano a mano con Koshevoy, a quien remató a 500 metros de meta. Por detrás saltó Aru como un cohete y dejó en evidencia a Froome, que llegó con un significativo retraso de 27 segundos sobre los favoritos.
Era la primera llegada en alto, en un puerto de primera. Chaves aguantó, Aru se postula como candidato y Froome quedó en evidencia. Era el primer asalto serio de la Vuelta.
Este sábado se disputa la octava etapa entre Puebla de Don Fadrique y Murcia, de 182,5 kilómetros.