El presidente del Real Betis, Juan Carlos Ollero, ha manifestado este miércolesque el club se siente «indignado» con la propuesta de sanción comunicada por la Comisión Antiviolencia del cierre de una grada del Benito Villamarín y que la consideran «oportunista» y «discriminatoria».
El dirigen, tras una reunión del consejo de administración del club verdiblanco, convocó una conferencia de prensa en el estadio Villamarín esta noche en la que precisó que la entidad «condena enérgicamente la violencia y especialmente contra la mujer» y que la afición bética en sus 107 años de historia «siempre ha tenido un comportamiento señorial».
Ollero ha apuntado que la entidad estima que se perjudican a 4.500 abonados que ocupan esa grada que se propone para su clausura y lamenta «el daño a toda la afición».
«El Betis, en nombre de sus más de 37.000 abonados, actuará donde sea necesario», ha apuntado el presidente del club sevillano, quien ha añadido que la sanción «debe ser asumida por los infractores no por la afición».
La Comisión Antiviolencia ha propuesto hoy el cierre parcial del Benito Villamarín por los cánticos ofensivos contra la exnovia del jugador bético Rubén Castro que se vienen produciendo en la zona Gol Sur del estadio.
Ollero ha relatado que el Betis no tenía conocimiento de estos cánticos ni por los informes policiales ni por las actas arbitrales de los partidos a los que se refiere, frente a la Ponferradina y el del pasado sábado ante el Girona, y que sólo conoció el incidente tras la reacción posterior de los medios de comunicación y de la nota publicada por la Liga de Fútbol Profesional (LFP).
«Cuando tuvimos conocimiento, el Betis se puso a disposición de las autoridades para que se examinaran los vídeos para identificar a las personas implicadas y también manifestó que el Betis se personaría en la causa como perjudicado», ha comentado.
El presidente de la entidad verdiblanca han insistido en «la actitud modélica» del Betis «en la lucha contra la violencia», lo que «ha quedado avalado en multitud de ocasiones», y que incluso «ha expulsado de su cuerpo social a abonados por comportamientos racistas o de otra clase».
Ollero también ha precisado que los vídeos de los partidos no los tiene el club pues los produce la Unida de Control Operativo (UCO) que está instalada en el estadio y que la dirige la policía.
«Pensamos alegar todo lo que sea posible alegar y estamos seguros de que nuestras alegaciones serán consistentes y coherentes», ha subrayado el dirigente, quien ha añadido que «la indignación del Real Betis es muy alta» y que en el club están «recibiendo testimonios de que la indignación de la afición es muy alta».
En su reunión de urgencia celebrada este miércoles en la sede del Consejo Superior de Deportes (CSD), Antiviolencia ha estudiado la denuncia presentada por la Liga de Fútbol Profesional sobre dichos cánticos machistas.
La Comisión recoge que el 8 de febrero pasado en el estadio Benito Villamarín, durante el partido contra el Ponferradina, «se entonaron cánticos que decían «Rubén Castro, Alé, Rubén Castro Alé, no fue tu culpa, era una puta, lo hiciste bien», y en el Betis-Girona del 21, en el mismo escenario, también se escucharon, por un grupo de espectadores denominado 'Supporters Gol Sur' el cántico «El equipo bastardo y penoso, el equipo de las putas del Pizjuán».