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Greipel rompe la hegemonía de Kittel

El ciclista alemán del equipo Lotto Belisol, Andre Greipel (c), celebra su paso por la meta al ganar la sexta etapa de la 101º edición del Tour de Francia, 194 kilómetros entre Arras y Reims, en Francia, este jueves 10 de julio del 2014. | KIM LUDBROOK

| Reims |

El ciclista André Greipel (Lotto) se ha impuesto este jueves en la sexta etapa de la 101ª edición del Tour de Francia, disputada entre Arras y Reims sobre 194 kilómetros, en un sprint descafeinado por la ausencia de algunos especialistas por el esfuerzo previo y la acción del viento, que provocó cortes en el gran grupo que no afectaron al líder, Vincenzo Nibali (Astana).

Pese al ataque sorpresa del polaco Michal Kwiatkowski en el último kilómetro, intentando evitar el sprint final, los equipos de los velocistas le dieron caza en la recta de meta y ahí, sin el hasta ahora dominador Marcel Kittel, fue su compatriota André Greipel el vencedor para olvidar un hasta ahora flojo Tour de Francia.

Los cortes en el pelotón por el viento fueron constantes. Estos 'abanicos' afectaron al francés y líder del FDJ para la general Thibaut Pinot, decimoquinto hasta este jueves, que cedió 59 segundos en meta, donde entraron el resto de candidatos junto al 'amarillo' Nibali.

Greipel logró su sexto triunfo de etapa en el Tour de Francia, primero en esta edición, imponiéndose con fuerza al noruego Alexander Kristoff (Katusha), de nuevo en la lucha pero sin suerte, y al francés Samuel Dumoulin (AG2R), en el 'podio' y cerrando la puerta a Renshaw (Omega) y Sagan (Cannondale).

Entre estos nombres de 'sprinters' había ausencias, pero una por encima del resto: Marcel Kittel. Este jueves, el alemán entró a 54 segundos después de sufrir un pinchazo en la aproximación a la lucha final. Tras su caída ayer, en el infierno del pavés, otro infortunio le aleja de la pugna por el triunfo. Un compatriota, Greipel, ha roto y acabado con su hegemonía, con tres victorias hasta el momento.

Fue un día que, sin comparación al del miércoles y el pavés, tampoco fue de relajación. Los 194 kilómetros de la etapa, sumado al viento que atizó al grupo y provocó cortes y abanicos, se sumaron a la caza de una fuga que se anuló a falta de diez kilómetros pero obligó a subir el ritmo del gran grupo.

Además, ha habido tres abandonos, dos de ellos españoles. Tras caerse ayer junto a su líder Chris Froome, que abandonó entonces, este jueves ha vuelto a irse al suelo Xabi Zandio (Sky) y se bajó de la bici aquejado del hombro. Por su parte, Alberto Contador (Tinkoff) pierde a su compañero y amigo Jesús Hernández, quien tras su caída también dice adiós a este Tour de Francia.

De cara a este viernes, una etapa de transición pero con un punto de interés. Transcurrirá entre Epernay y Nancy, sobre 234,5 kilómetros, y cuenta con dos pequeñas cotas de cuarta categoría en la parte final de la etapa. La última de ellas, la Càte de Boufflers, está ubicada a 5,5 kilómetros de la meta y puede decidir si se llega o no al sprint.

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