Rusia, Bosnia e Inglaterra aprovecharon la ventaja de depender de sí mismo y amarraron el billete para Brasil 2014, al que acudirán sin necesidad de disputar una eliminatoria extra a la que quedaron abocados, entre otros, equipos como Francia, Portugal, Grecia o Suecia.
Rusos, bosnios e ingleses se unieron a Alemania, Bélgica, Italia, Holanda y Suiza, que recogieron con anterioridad sus derechos. Francia, Portugal y Grecia, unidos a Croacia, Suecia, Rumanía, Ucrania y, por primera vez en su historia Islandia, conformarán los enfrentamientos de repesca, de donde saldrán los cuatro últimos equipos europeos que formarán parte del Mundial. Dinamarca se quedó fuera de toda opción. Fue la peor segunda clasificada.
Francia tenía asumida su condición de segunda y así acabó. Venció a Finlandia (3-0) con los goles de Frank Ribery, el anotado en propia puerta por Joona Toivio y el de Karim Benzema.
Wayne Rooney y Steven Gerrard enterraron las dudas alrededor de Inglaterra, que venció a Polonia (2-0). El combinado de Roy Hodgson se plantó con el triunfo en la fase final y derribó las ilusiones de Ucrania a pesar de su goleada en San Marino (0-8) con cuatro goles de Marko Devic y un doblete de Yevhen Seleznyov.
Rusia obtuvo el pase directo tras empatar en un partido de alta tensión ante Azerbaiyán (1-1), con lo que condenó a la Portugal de Cristiano Ronaldo a la ruleta rusa de la repesca mundialista.
Bosnia-Herzegovina hizo historia. Selló el pase como primero de su grupo tras obtener un agónico triunfo en Kaunas ante Lituania (0-1). Grecia cumplió con la parte que le correspondía para mantener sus opciones de clasificación directa para el Mundial y ganó a Liechtenstein, aunque fue condenada a la repesca tras la victoria de Bosnia.
Rumanía amarró la repesca. Dos goles del delantero del Getafe Ciprian Marica le dieron la victoria sobre Estonia y, con ella, el segundo puesto del grupo D en detrimento de Turquía, que se quedó fuera de Brasil.