El Constància ha decidido no renovar a Nico López como técnico de cara a la próxima temporada en la que el club inquer regresará a Segunda División B tras dos décadas. La entidad que preside Antoni Ramis comunicó ayer su decisión al técnico, que se mostró «dolido» por una decisión «esperada». Y es que Nico López, que condujo al equipo al ascenso tras tres temporadas en las que los albinegros siempre estuvieron en los puestos de playoff, tiene claro que su salida del club responde a «un problema personal» con el presidente.
El comunicado hecho público ayer por el Constància, que agradeció los servicios prestados a Nico López, asegura que la decisión del club tiene como argumento principal el deseo de «comenzar un nuevo ciclo en total consenso con el área deportiva, y considera que la base de este proyecto debe comenzar con la contratación de un entrenador de común acuerdo entre ambas partes y consensuando todas las parcelas de dicho proyecto».
El técnico inquer , que fue considerado como la piedra angular del proyecto en Segunda B por los propios responsables del club tras conseguir el ascenso, confirmó que no ha recibido oferta de renovación alguna por parte del club y manifestó que «no hay motivos económicos, simplemente es una cuestión personal con el presidente».
«Me sabe mal porque es el equipo de mi pueblo y porque no podré continuar con el grupo de jugadores con el que se logró subir y en el que había mucha ilusión por jugar en Segunda B», valoró Nico López.
El Constància, por su parte, incia ahora la búsqueda de un nuevo entrenador tres semanas después de haber logrado el anhelado ascenso a la categoría, lo que reducirá el margen de maniobra que le concedía haber subido antes que nadie.