La clasificación de la Liga afronta esta tarde otra jornada clave para acabar de definir los puestos de descenso. Los principales inquilinos de la zona baja se adentran regresan a escena y en función de lo que ocurra podrían conocerse las primeras sentencias.
Por un lado, la Real Sociedad peleará por una victoria en la visita del Racing que le garantice la permanencia, lo que condenaría a los cántabros matemáticamente al descenso. Hay cierto aire de revancha en San Sebastián por lo ocurrido hace cinco años, cuando el conjunto santanderino empató y mandó a Segunda a los realistas, que no entendieron el exceso de celo que puso su rival en aquel partido. No pueden fiarse, sin embargo los donostiarras, porque casi siempre le toca sufrir cuando enfrente está el Racing, a pesar de que ello no se traduce en resultados muy positivos para los de Álvaro Cervera cuando visitan la capital guipuzcoana.
En Cornellà, el Espanyol recibirá al Sporting en un partido que determinará las opciones europeas de los blanquiazules y las posibilidades de salvarse de los asturianos, que llegan al feudo catalán como el peor equipo a domicilio de Primera división. Los blanquiazules han sumado en este mes de abril cinco puntos de quince posibles. La última derrota ante el Atlético de Madrid fue un duro mazazo para los pericos y desde el vestuario se ha insistido en la importancia de la victoria para seguir soñando con Europa. El equipo cifra en unos diez puntos lo necesario para su ansiada meta.
Mientras tanto, en el Ciutat de València el Levante recibe al Granada, virtualmente salvado, en un partido considerado en el club como la primera de las cuatro 'finales' que les quedan por alcanzar su sueño de jugar en Europa. Juan Ignacio Martínez, entrenador del Levante, sólo tendría la baja por lesión del defensor Javi Venta, aquejado de un fuerte golpe en el pie izquierdo, aunque el técnico dará la lista definitiva de convocados mañana y todavía se desconoce si estará presente en la misma.
Para cerrar el sábado Villarreal y Osasuna se cruzan en El Madrigal con objetivos diferentes, ya que el equipo local quiere dar un paso más hacia la salvación, mientras que el conjunto navarro necesita los puntos en su lucha por competir el año próximo en Europa.
La diferencia entre ambos equipos está en que una victoria local supondría, práctica aunque no matemáticamente, la continuidad en Primera, mientras que el conjunto navarro está actualmente fuera de los puestos europeos, a los que puede regresar con un triunfo.