En un momento decisivo para su futuro deportivo, una de las mejores nadadoras que ha dado Mallorca en toda su historia afronta una reválida clave para su porvenir en la piscina. María Fuster Martínez (Palma, 1985) desea volver a repetir experiencia olímpica, aunque el billete para los Juegos de Londres cotiza por las nubes. Pese a lograr la mínima con el relevo 4x100 estilos (en el Mundial de Shanghai y junto a Judith Ignacio, Marina García y Duane da Rocha, 4:03.98), la nadadora del CN Palma afronta una reválida de altura en los Campeonatos de España Open de primavera en piscina de 50 metros, que arrancan mañana en Málaga.
Serán cuatro días en los que se cerrará el equipo que representará a España el próximo verano en Londres. Y Fuster no quiere perder la oportunidad de poner un broche de oro a su carrera con sus segundos Juegos, tras nadar los relevos 4x200 libre y 4x100 hace cuatro años en Pekín.
Opciones
Fuster, junto a Melanie Costa, encabezan las opciones baleares de cara a lograr marca mínima y ganarse un hueco en la selección. «Hace cuatro años quería vivir unos Juegos y ahora voy a intentar disfrutarlos y luchar por estar allí», aseguraba María, que será una baza importante para el Palma en 50 (jueves), 100 (sábado) y 200 libre (viernes), donde optará a plaza olímpica, aunque el reto es refrendar el resultado del Mundial y cerrar su presencia entre las cuatro elegidas para nadar el relevo 4x100 estilos.
Algo que para María pasa principalmente por ganar los 100 libre (es la gran favorita), o igualmente poseer la mejor marca nacional en la distancia. Todo, sin renunciar a firmar una mínima olímpica en esa disciplina o las otras. La deportista condiciona su futuro a su presencia o no en Londres. «Por ahora, me centro en el nacional y la Liga de Clubes... después, espero nadar en Londres, sería un premio a muchos años de trabajo. Sino, ya veremos», dice la nadadora entrenada por Marcelo Cuartero e integrante del equipo Preolímpico.
«Te lo juegas a una carta, pero por estadística tengo opciones, aunque tengo que ser prudente. En pruebas individuales es difícil obtener mínima y el relevo es una gran oportunidad. En 100, es difícil, pero en 50 mucho más», aseguraba Fuster. Concentraciones en altura (Sierra Nevada), entreno fuerte en agua, gimnasio, técnica y trabajo aeróbico y de velocidad han compuesto el plan de Fuster para volver a ser olímpica. «Sé que no me iban a regalar la plaza», apostilla Fuster, que tras Pekín decidió alargar cuatro años su carrera rumbo a Londres.
Marco Rivera
El nadador mallorquín del Santa Olaya no se ha inscrito en los nacionales por motivos laborales que le han impedido preparar el preolímpico, descartándose así su presencia en los Juegos, tras estar en Atenas y Pekín.