El ciclista madrileño Alberto Contador comparecía ayer en conferencia de prensa para asegurar, en primer lugar, que va a seguir «plenamente» en el ciclismo profesional, y que piensa llegar «hasta el final» a la hora de presentar un recurso que pueda revocar la sanción impuesta por el TAS.
Alberto Contador hizo su aparición en la sala de eventos Arco del Hotel Las Artes de Pinto pasadas las 19:30 horas y recibía un aplauso cerrado de los presentes, lo que no le hizo cambiar el gesto serio con el que comparecía. Ante más de 50 cámaras de televisión y más de un centenar de periodistas, el corredor pinteño comenzaba diciendo que tenía un sentimiento de decepción y de desilusión «enorme» y reconocía que su estado de ánimo «es muy complicado».
Contador recordó que hace más de un año y medio que comenzó el proceso «y no hay una sola mañana que no me pregunte cómo puedo estar en esta situación. No se lo deseo a nadie. Ha habido múltiples especulaciones, filtraciones... Ha sido un auténtico calvario. El sufrimiento de mi familia, de mi mujer, de toda mi gente... Además, por lo que se me estaba acusando es algo que va en contra de lo que se me ha inculcado: la justicia, la disciplina, la honestidad», enumeraba.
El ciclista se mostraba «en total desacuerdo» con la sanción de dos años de suspensión impuesta por el TAS y confesaba que «por más que lo intento, no puedo entenderla». «En estos meses he hecho todo lo posible, todo lo que está en mi mano, para demostrar mi inocencia. He hecho incluso el polígrafo, cinco horas contestando preguntas como si fuera un delincuente, sólo dos días antes del Giro. Y todo para al final recibir esta resolución», lamentaba.
Sin embargo, el campeón de las tres grandes vueltas afirmó que alberga un sentimiento de «satisfacción», ya que «cualquiera que lea la resolución verá que deja claro que no me he dopado».
Éste es el motivo por el cual Alberto Contador aseguró que piensa seguir compitiendo como ciclista profesional «por varios años más» y que lo va a seguir practicando «de forma limpia, como lo he hecho toda mi vida», y adelantó que, aunque ahora su estado de ánimo es bajo, «sé que esto me va a hacer más fuerte en el futuro».
Sobre el hecho de que le hayan desposeído de sus triunfos en el Tour de Francia 2010 y en el Giro de Italia 2011, Contador sentenciaba que no busca números en su palmarés.
«Con lo que yo me quedo y con lo que disfruto es con el recuerdo que queda en la gente después de estar en cada competición y con la satisfacción del trabajo bien hecho. Cada una de esas victorias no son mías, sino de todas las personas que han disfrutado con ellas. Quedarán en su memoria y ellos podrán decidir quien ha ganado cada una de esas carreras», sentenció, lo que provocó que la sala prorrumpiera en aplausos.
Obstáculos
El corredor pinteño adelantó que sus abogados están trabajando sobre la posibilidad de recurrir a la justicia ordinaria y aseveró que van a seguir luchando «hasta el final», ya que les ha transmitido a sus abogados «que hay que llegar hasta el último momento» para intentar revocar el castigo del TAS.
La trayectoria profesional de Alberto Contador ha estado salpicada de obstáculos desde su debut en 2003 en las filas del ONCE, y en ella se han mezclado problemas físicos y diversos episodios relacionados con el dopaje. Su principal problema físico fue una lesión cerebral que a punto estuvo de costarle la vida, Entre los episodios relacionados con el dopaje destacan la implicación de su equipo, el Liberty, en la Operación Puerto, y el positivo por clembuterol que le acarrea una suspensión de dos años.