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Carmona ofrece a Guardiola lo mejor de su repertorio

El mallorquín marca en la tanda de penaltis y da el pase del segundo gol del Barcelona, que se deshace del Internacional

Carlos Carmona, segundo por la izquierda, celebra con sus compañeros el segundo gol de los azulgranas. | MICHAEL DALDER

| Múnich |

BARCELONA: Valdés; Riverola, Busquets, Fontas, Maxwell; Keita, Thiago, Iniesta, Afellay, Cuenca y Jonathan Soriano.

También jugaron: Pinto; Abidal, Jeffren, Villa, Balliu, Dos Santos, Pedro, Carmona, Armando, Rosell y Espinosa.

INTERNACIONAL: Muriel; Nei, Bolívar, Rodrigo Moledo, Kléber; Bolatti, Tinga, Elton, Andrezinho, D'Alessandro; y Leandro Damiao

También jugaron: Ricardo Goulart, Wilson Matías, Glaydson, Joao Paulo, Ze Maria y Lucas Roggia.

Àrbitro: Felix Brych (ALE). Mostró cartulina amarilla a Rodrigo Moledo, Busquets y Tinga.

Goles:

1-0, minuto 15, Thiago Alcántara.

1-1, minuto 55, Nei.

2-1, minuto 63, Jonathan dos Santos.

2-2, minuto 85, Leandro Damiao.

La tanda de penaltis (4-2) le dio ayer al Barcelona el pase a la final de la Copa Audi, que se juega en Múnich (Alemania), después del empate (2-2) ante el Internacional de Porto Alegre brasileño en un partido en el que los azulgrana jugaron a buen nivel en el primer tiempo, pero no mantuvieron el tipo en el segundo con los numerosos cambios introducidos. Entre los múltiples jóvenes que alineó Guardiola merece una mención especial el mallorquín Carlos Carmona, que asistió a Jonathan dos Santos en el segundo tanto culé y materializó uno de los lanzamientos de la tanda de penaltis.

Sin los cinco sudamericanos ni la presencia de Xavi, Piqué y Puyol, el Barça volvió a echar mano de buena parte de los jóvenes, entre los que sobresalió Thiago tanto por su gol como por la sociedad que formó con Andrés Iniesta en la sala de máquinas azulgrana.

Tras una primera mitad de dominio culé, los cambios desajustaron a los campeones de Liga y Champions. No obstante, una jugada de calidad de Carmona habilitando a Jonathan dos Santos se tradujo en el 2-1, que resultó balsámico para un Barça que se reencontró con su juego.

Los brasileños se encontraron con el empate a cinco minutos del final. Abidal sacó bajo palos un remate del Inter, después de un error de Pinto, y en el siguiente saque de esquina, Leandro Damiao marcó el 2-2 en una tímida salida del portero suplente azulgrana.

En la tanda de penaltis, el Barça estuvo más acertado y marcó cuatro de los cinco lanzamientos (sólo falló Jeffren), los brasileños fallaron dos y los azulgrana se clasificaron para la final, donde hoy (20.45) se miden al Bayern Múnich después de que los germanos superaran al Milan en los penaltis.

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