Carlos Moyá, el primer tenista español que alcanzó el número uno del mundo (15 de marzo de 1999), aseguró hoy que su compatriota Rafael Nadal se encuentra en el buen camino para convertirse en «el mejor» jugador de la historia, algo que, reconoció, no esperaba.
«Lo conocí cuando él tenía doce años y parecía tener un futuro prometedor y algo especial, pero nunca pensé, para ser honestos, que podría ser tan bueno», reconoció Moyá tras el homenaje que recibió hoy con motivo de su retirada profesional el próximo mes y que tuvo como marco la pista central del O2 de Londres, donde los ocho mejores del mundo disputan el último torneo de la temporada.
«(Nadal) ya es uno de los mejores tenistas que ha habido nunca y está en camino de convertirse en el mejor. Nunca me lo hubiera imaginado», añadió sobre los logros que está consiguiendo el otro mallorquín, de 24 años, del que Moyá aseguró que aprecia como jugador y como persona.
El que fuera campeón de Roland Garros en 1998, con sólo 21 años, confesó además que había sido «muy duro» para él anunciar el pasado miércoles en Madrid su retirada del tenis profesional, algo que cumplirá el próximo mes en el Masters Nacional de Sevilla.
El deportista explicó que se trataba de una decisión «tomada en el 99 por ciento hace varios meses», concretamente el 10 de abril de este año en el Masters 1.000 de Madrid, dónde cayó por 6-0 y 6-2 frente al alemán Benjamin Becker.
«La última vez que derramé una lágrima por esto fue en el partido de Madrid. Ahí sabía al 99 por ciento que no iba a volver a jugar un partido. Pero tenía que ver si era el calentón del momento o qué», dijo, ya que, para él «no hay vuelta atrás».
«No quiero decir ahora lo dejo y a las dos semanas volver a jugar», sentenció el jugador, quien admitió que era una decisión que debía tomar «por respeto» a sí mismo y a la gente que había estado con él durante su carrera.