Getafe 4 - 3 Sevilla
Getafe: Codina; Cortés, Rafa, «Cata» Díaz, Mané; Boateng, Celestini (Casquero, min. 55); Pedro León, Adrián (Parejo, min. 76) Gavilán (Manu, min. 71); Miku.
Sevilla: Palop; Stankevicius (Lolo, min. 66); Cala, Escudé, Fernando Navarro; Jesús Navas, Renato, Zokora, Adriano (Adriano, min 71); Kanouté y Luis Fabiano (Negredo, min. 82)
Goles: 1-0, min. 16: Adrián aprovecha un pase en profundidad de Pedro León. 1-1, min.33: Luis Fabiano remata una jugada de Adriano por la izquierda. 1-2, min. 37: Kanouté define dentro del área. 2-2, min. 58: Pedro León, desde dentro del área. 2-3, min. 59: Luis Fabiano. 3-3, min. 75: Manu del Moral.
Àrbitro: Clos Gómez, del Comité Aragonés. Mostró tarjeta amarilla a Stankevicius (min. 18) por parte visitante y a Mané (min. 43), Miku (min. 55) Pedro León (min. 62), Casquero (min. 86) y «Cata» Díaz por parte local. Expulsó por doble a amonestación a Kanouté (min. 21 y 85).
El Getafe sigue soñando con Europa a costa del Sevilla, derrotado en un partido épico con muchas alternativas en el marcador, que acabó con un resultado (4-3) que aleja a los andaluces de los puestos que dan derecho a jugar la próxima temporada la Liga de Campeones.
Ambos equipos tenían muchas cuentas pendientes de anteriores citas. Sobre todo el Getafe, que casi siempre ha salido escaldado de los encuentros importantes ante el Sevilla. Perdió una de sus dos finales de Copa frente a los andaluces hace tres temporadas. Esta misma campaña, la historia se repitió en semifinales. De nuevo el conjunto de Nervión acabó con las esperanzas de los hombres de Míchel por conseguir un título.
Y lo hizo jugando mucho peor. Entonces, el Getafe dio un repaso en los dos partidos al Sevilla. Pero no se llevó el gato al agua. Suele pasar con los equipos grandes, que a veces aprovechan sus pocas ocasiones para doblegar al rival. En esta ocasión, de nuevo, el equipo de Antonio Alvarez practicó ese juego. Racaneó al máximo para conseguir un buen premio.
No le salió mal la jugada. Por lo menos, en la primera parte, cuando el Getafe sacó los colores al Sevilla. Dominó sin paliativos y sin discusión a su rival. Lo hizo con una gran actuación de Adrián González. El centrocampista protagonizó casi todas las jugadas de peligro de su equipo. En 45 minutos, disparó en dos ocasiones al poste, marcó el primer gol del partido, y remató con el muslo en semifallo un tanto cantado.
La actuación de Adrián le reconcilió definitivamente con la grada. El hijo de Míchel tuvo que salir del campo muy satisfecho. Desde que volvió a jugar tras su lesión ha mejorado infinitamente. El público del Coliseum deberá pensar en cambiar el discurso y la frase que siempre, entre corrillos, dedica al zurdo del Getafe. Si sigue jugando así, en breve dejará de ser el hijo de Míchel. Míchel será el padre de Adrián.
Pero su gran actuación en el primer acto no tuvo recompensa colectiva. El Sevilla, con un juego plano, sólo necesitó quince minutos y un fogonazo por cada banda para darle la vuelta al partido. Primero Adriano, desde la izquierda, sirvió a Luis Fabiano para que el brasileño empatara el duelo. Después, Jesús Navas, hizo lo mismo con Frederik Kanouté, que de forma injusta dio la vuelta al partido.
El Getafe se marchó al vestuario con tres disparos a los palos (aparte de Adrián, el venezolano Miku estrelló un balón contra el poste), quejándose al árbitro, que pudo pitar un penalti sobre Pedro León, y con la sensación de que había dejado vivo a un equipo al que había pasado por encima.
Todos esos detalles pasaron factura al Getafe, que salió adormilado en el segundo acto. Tardó en volver a coger el ritmo del partido y sólo lo volvió a retomar cuando las cosas se ponían feas. Entre medias, Luis Fabiano lanzó una falta al travesaño para asustar al respetable del Coliseum, que vio como su equipo marcó el empate cuando menos lo esperaba. Lo hizo Pedro León con un disparo desde dentro del área.
La reacción getafense apenas duró más de un minuto. Fue el que necesitó la pareja Luis Fabiano-Kanouté para fabricar el tercero. Entre los dos enloquecieron a la defensa «azulona» y fue el brasileño el encargado de poner por delante del marcador a su equipo.
Entonces, el Getafe tocó zafarrancho de combate para hacer justicia, pero, como en la vuelta de las semifinales de Copa, Andrés Palop empezó a sacar balones casi imposibles. Lo hizo con Pedro León y con Adrián González, que poco después iba a ser de nuevo protagonista.
Cuando parecía que el portero valenciano iba a volver a amargar la noche al Getafe, Adrián se sacó un magnífico pase profundidad de la chistera para que Manu empatara el partido. Quedaban quince minutos y los madrileños intentaron no descolgarse de Europa con el cuarto. Lo consiguió Parejo, de penalti, cuando el partido agonizaba. Tuvo que tirarlo dos veces. Con incertidumbre, la pelota entró, el Getafe ganó un partido heroico y sigue en la pelea, a dos puntos de la Europa League. El Sevilla, se aleja un punto del cuarto puesto, en poder del Mallorca.