Apenas lleva dos años en marcha, pero el Centre de Tecnificació de motociclismo ya se ha encargado de hacer suficiente ruido dentro del mapa deportivo de la Escola Balear de l'Esport (EBE) como para ser uno de los proyectos más prometedores. Con Sebastià Crespí al frente de la dirección técnica y Tomás Comas abanderando una parcela tan fundamental como es la preparación física, esta iniciativa ha conseguido reunir a un nutrido y solvente grupo de pilotos que pueblan el grueso de las especialidades y han convertido el polideportivo Príncipes de España y el circuito Mallorca Renn Arena de Llucmajor en sus centros de operaciones.
Velocidad, trial y motocross son los ejes sobre los que vertebra un Centre de Tecnificació que ha empezado a recoger sus primeros frutos. La presencia de dos pilotos mundialistas, Marc Horrach en trial y Joan Perelló en velocidad, y el tercer puesto del segundo en el Europeo de 125 centímetros cúbicos, han acabado por disparar las expectativas de una iniciativa que ya se ha hecho notar en el balance de resultados de 2009.
La formación deportiva va a la par que la académica dentro del Centre, que tiene como prioridad dar una salida de garantías y ser trampolín para una futura incursión en el campo profesional. El trabajo en pista o sobre el terreno, unido a la labor de preparación física y una completa cobertura psicológica y biomédica ayudan a que estos pilotos puedan disfrutar de un ambiente idóneo para madurar sobre dos ruedas.
El apoyo de la Federación Balear de Motociclismo, y la comprensión mostrada desde la Conselleria d'Esports han resultado claves para sacar adelante un Centre de Tecnificació que ya ha empezado a capitalizar las miradas de otras regiones del país.
Por el momento, el grupo de velocidad es el más numeroso. Joan Perelló "piloto puntero en el CEV, tercero de Europa y mundialista con el equipo Stop and Go Honda-, Kike Ferrer (brillante en el Campeonato Mediterráneo), Alfonso Ho y un Àngel Poyatos que apunta al Campeonato de España tras despuntar en la Kawasaki Júnior Cup, forman este conjunto de jóventes talentos, que compaginan su trabajo en la EBE con la competición con sus respectivos equipos. Diez horas semanales, entre sesiones físicas y técnicas, conforman el libro de ruta de los pilotos.
En trial, Marc Horrach se ha consolidado dentro del equipo nacional en categorías inferiores, y su presencia en el Europeo y el Mundial júnior se han convertido en un clásico. A su vera, Josep Seguí apunta buenas maneras más allá del archipiélago. El motocross concentra importantes dosis de optimismo. Pedro Jofre y un Miquel Munar que empieza a despuntar en el territorial y ante adversarios de mayor edad y experiencia, han mostrado progresos espectaculares en los últimos meses.
Todo ello ha llevado a, según el responsable técnico del Centre, Sebastià Crespí, «a cumplir más del 50% de los objetivos trazados. Tenemos a dos pilotos disputando sus Mundiales y al resto, dentro de las principales competiciones nacionales de sus especialidades», asevera.
En plena eclosión de los deportes de motor, el Centre de Tecnificació de motociclismo se ha convertido en una bocanada de aire fresco, y ha ayudado a abrir a este tipo de especialidades al amplio universo que cubre la EBE, que salda así una cuenta pendiente que tenía contraída con el motociclismo y permite dar salida a un grupo de pilotos que ha demostrado poder codearse con los mejores del panorama nacional.
Tras los pasos del bicampeón del cuarto de litro y flamante subcampeón de la categoría reina, Jorge Lorenzo, se sitúan ahora los jóvenes talentos de una cantera que llama con fuerza a las puertas de la élite. Y es que a corto plazo Balears podrá presumir de nuevos logros en una modalidad en la que hacía falta un salto de calidad en el ámbito de la tecnificación con el apoyo institucional.