Desencajado. Con los restos de su paso por el hospital reflejados en su rostro y la moral minada por la catarata de informaciones económicas que está arrasando la actualidad mallorquinista, Javier Martí Asensio optó por mantener el discurso optimista y aportar una versión diametralmente opuesta a la que ofreció su padre y propietario del Real Mallorca el pasado jueves.
Mientras que el dueño reconoció a los integrantes del consejo de administración las enormes dificultades para cumplir con el calendario de pagos, el consejero delegado escogió otro camino y se inclinó por ocultar la situación. «El tiempo dará o quitará razones. Se ha escrito mucho durante los últimos días sobre la situación financiera de la entidad, pero quiero dejar claro que está mejor que cuando nosotros accedimos al club hace poco más de dos meses», aseguró Javier Martí a este periódico nada más llegar al estadio, treinta minutos antes de iniciarse el encuentro.
El consejero delegado se mostró confiado en poder saldar una parte notable de las deudas que acumula la entidad, sobre todo con los proveedores, y el retraso producido en el pago a los futbolistas del primer equipo por las primas, un concepto que se incrementa punto a punto y que esta semana ya ascenderá hasta los 210.000 euros, generados por las victorias ante Getafe y Racing y el empate en el Vicente Calderón frente al Atlético: «Vamos a cumplir con los pagos. Eso seguro. Y esta próxima semana deberá quedar todo resuelto».
Javier Martí no ocultó su decepción por todas las informaciones aparecidas en los últimos días: «Supongo que estáis en vuestro derecho de informar, pero me parece excesivo todo lo que está ocurriendo. De todas formas, el problema lo tengo dentro del club. Habrá que cerrar mejor las ventanas», señaló el consejero delegado. En relación al silencio del club en la jornada el pasado jueves, cuando nadie de la entidad informó a pesar de la presencia urgente del propietario a la Isla, apuntó: «Quizás mi padre se equivocó viniendo aquí. Él no habla y yo no podía contestar a todas las informaciones porque me encontraba en la cama de un hospital».
Javier Martí negó rotundamente que su familia quiera abandonar su aventura en el Mallorca. «¿Quién ha comentado eso? Nuestra intención es continuar y mi deseo es seguir 4 ó 5 temporadas más, como siempre he comentado».
En relación a la deuda que la propiedad mantiene con Mateu Alemany, que sólo ha cobrado el primer pagaré de 500.000 euros y el banco le ha devuelto otro por la mima cantidad en los últimos días, optó por enviar balones fuera: «Dudo que Mateo, que es mi amigo, haya dicho que le debemos dinero. De todas formas, Alemany y yo llegaremos a un entendimiento y será en privado porque a nadie le interesa».
El consejero delegado, que por la mañana asistió en directo a la victoria del filial, insistió en no estar preocupado por la la situación económica: «Lo que me preocupaba era conseguir los tres puntos, lo demás tiene solución. Todo se solucionará».
Finalmente, apeló a la crisis global para asegurar que la «situación económica no es la ideal, pero ni aquí ni en ninguna empresa». Además, apuntó que el análisis se deberá evaluar «el próximo 30 de junio» que es «cuando se deben extraer conclusiones sobre nuestra gestión».