Dos goles del francés Karim Benzema en el arranque del segundo tiempo dieron ayer tarde al Real Madrid su quinta victoria consecutiva ante el Tenerife en un partido en el que ofreció dos caras, una pésima en la primera mitad y otra más cercana a lo que se espera de este equipo tras el descanso. Los blancos son ahora líderes de Primera.
Otra vez la pegada salvó al conjunto de Manuel Pellegrini. En esta oportunidad fue el ex jugador del Olympique de Lyon el protagonista del triunfo y el que desatascó, junto a la salida tras el descanso de Kaka y de Guti, un compromiso en el que los madridistas no empezaron a jugar hasta la vuelta de los vestuarios.
El Tenerife aguantó y controló a su antojo en los 45 minutos iniciales. Fue el único que llegó despierto al encuentro, pero no pudo soportar cuando el Real Madrid, con sus figuras, comenzó a carburar. No obstante, los insulares tuvieron sus ocasiones para no ser derrotados de forma contundente, pero no tienen esa pegada de los 'blancos' e, incluso, Iker Casillas se lució como en las mejores ocasiones para mantener la portería a cero por cuarto partido consecutivo. José Luis Oltra demostró tener muy bien aprendida la lección y aunque por su perfeccionismo se desesperó en momentos puntuales, su equipo 'durmió' en la primera parte al conjunto de Manuel Pellegrini, una sombra de lo que la afición quiere de este nuevo proyecto en la primera parte. El Real Madrid cuajó una primera mitad para el olvido, o para recordarla, según se mire. Peor no lo podía hacer ante un rival que sabía lo que tenía que hacer pero al que le faltaba remate.
Dos suplentes, el delantero sueco Zlatan Ibrahimovic y el defensa Gerard Piqué, fueron decisivos en el Barcelona para que su equipo consiguiera una victoria que se le había atragantado hasta el minuto 38 ante un buen Málaga, bien plantado, pero con falta de llegada a la portería rival. Por diferencia de goles, el conjunto catalán cede el liderato al Madrid y se sitúa segundo. El técnico del Málaga, Juan Ramón Muñiz, solamente hizo un cambio en el once inicial con respecto a los que jugaron contra el Espanyol al introducir al joven lateral izquierdo Manu Torres por el danés Patrick Mtiliga. Pep Guardiola, dejó al delantero sueco Zlatan Ibrahimovic en el banquillo por problemas físicos y su lugar lo ocupó Pedro. Los demás los mismos que golearon al Racing en Santander. El Málaga salió agresivo, con una gran presión en el centro del campo que descentró por momentos al Barcelona y al que sorprendió este planteamiento tan fuerte en los primeros minutos. El delantero nigeriano Víctor Obinna, tuvo la primera ocasión con lanzamiento fuera por muy poco.