El mundo del motor podría ver saldadas buena parte de las deudas que arrastra desde hace años. El capítulo de instalaciones es una cruzada para el mundo de las dos y las cuatro ruedas, pero parece que un proyecto puede acabar por dar salida a los aficionados y la cantera del motociclismo y el automovilismo isleño. Y es que el Institut Municipal de l'Esport del Ajuntament de Palma (IME) ha encontrado en Son Oms el espacio indicado para desarrollar un Parc Motor en el que tengan cabida todos los ámbitos de estas modalidades. Por el momento, un estudio de viabilidad y un anteproyecto están sobre la mesa, pendientes de la elaboración de un informe de impacto ambiental y de la puesta en marcha del concurso a través del cual se adjudicarán las obras y la concesión del recinto, que podría prolongarse por espacio de 35 años. La inversión inicial rondaría los dos millones de euros (entre 2'2 y 2'4 en las previsiones iniciales), teniendo que financiar un 20% del importe como aval y cubrir el resto a través de un préstamo.
Pretendientes
Hasta el momento, varias entidades y promotores particulares han mostrado su interés y predisposición a estudiar o asumir el proyecto. Además de la Federación Balear de Motociclismo, otros inversores privados, e incluso el piloto mallorquín Jorge Lorenzo, que ha visto con buenos ojos esta iniciativa -su padre, Chicho, ha sido uno de los impulsores de la idea-, se posicionan. No en vano, el presidente del IME, Baldomero Oliver, dejó ver que les gustaría que la instalación llevara el nombre del doble campeón del mundo de 250 y actual colíder del Mundial de MotoGP, una propuesta que tienen «intención de llevar al Pleno cuando el recinto sea una realidad tangible. Nos gustaría que pudiera tener su nombre por lo mucho que ha hecho por el motociclismo y por el deporte mallorquín y español».
El IME realizaría una cesión administrativa de los terrenos (de 29.172 metros cuadrados de extensión) para que los licitantes se hagan cargo de las obras y la explotación de un Parc Motor que lleva meses gestándose, y en el que el IME se reservaría una serie de días y horas anuales en las que poder realizar actuaciones que dependen directamente del órgano rector del deporte en Ciutat.
El anteproyecto contempla las previsiones de gastos e inversiones en mantenimiento y equipamientos, y los beneficios que puede reportar su explotación, que requeriría de un equipo profesional al frente de la instalación, llamada a ser una referencia para el deporte del motor isleño.