Efe|LOSAIL
La primera prueba del Mundial de Motociclismo, celebrada parcialmente en la jornada de ayer en el circuito qatarí de Losail, desprendió pocas conclusiones tras un descanso prolongado de seis meses, ya que las inclemencias meteorológicas se convirtieron en el gran protagonista al afectar parcial -125 y 250 centímetros cúbicos- o totalmente -con la prueba de MotoGP suspendida- al desarrollo de las distintas pruebas de la manga inaugural de la temporada 2009 en el Campeonato del Mundo de velocidad, después de que Casey Stoner fuera el gran dominador de los entrenamientos celebrados durante el fin de semana, con el mallorquín Jorge Lorenzo (Fiat Yamaha) instalado en ña tercera posición de la parrilla de salida, por detrás de su compañero de equipo y vigente campeón del mundo, el italiano Valentino Rossi.
Y es que el efecto espejo que producen los focos sobre el asfalto y que provocan la confusión de los pilotos mientras llueve al no diferenciarse los charcos del efecto luminoso de los focos. Por este motivo y por la lluvia torrencial, los pilotos de MotoGP decidieron no arriesgar su integridad física en una pista impracticable para el pilotaje y la prueba fue aplazada por parte de la organización hasta las 20 horas de la jornada de hoy. Las previsiones de lluvia que fueron protagonistas durante toda la semana acabaron convirtiéndose en realidad en el peor de los momentos, el día de las carreras. Y entonces, ni el reglamento deportivo ni nada parecido, sirvió a la hora de transformar el gran premio al antojo de la organización. El citado reglamento indica que, en caso de tenerse que suspender una carrera por la lluvia antes de que se cumplan los dos tercios de la misma, ésta se debe completar hasta esa distancia. Lo que es lo mismo, la carrera estaba prevista a 18 vueltas, por lo que los dos tercios se cumplirían con doce vueltas y, como se habían completado cuatro, faltaban ocho por disputarse.
La anterior ocasión no fue en el 2004 en Mugello en MotoGP con seis vueltas, como se pensó inicialmente, sino el pasado año en Francia en la prueba de 125, que dieron sólo cinco vueltas y ganó el francés Mike di Meglio. Pero esto no fue todo, ya que en una decisión sin precedentes recientes, se decidió acortar la carrera de 250 desde las veinte vueltas iniciales a solo trece.
Sin embargo, nadie habría previsto el diluvio que aconteció, ya que a tan sólo diez minutos del inicio de la carrera de la cilindrada reina, todos los pilotos estaban colocados en su posición en la parrilla guardando un emotivo minuto de silencio por las víctimas del terremoto en Italia, que iba a ser la antesala de una prueba esperada. Desde ese momento, el cielo se encapotó y la tromba cayó hasta casi anegar los 'boxes'. La dirección de carrera esperó más de 45 minutos para decidir definitivamente cancelar la carrera.
Los pilotos decidieron con cierta rapidez aceptar las garantías de la organización de que se intentará limpiar al máximo la pista para hoy y disputarán el Gran Premio de Qatar de MotoGP. Además del compromiso de limpiar la pista, también se confirmó que si la lluvia vuelve a hacer acto de presencia se cancelará definitivamente la carrera. En la reunión que realizaron los pilotos, en la que se encontraban, entre otros, Valentino Rossi y Andrea Dovizioso, el australiano Casey Stoner y el australiano Chris Vermeulen, además del estadounidense Nicky Hayden, se adoptó la decisión de participar en la carrera. Obviamente quienes menos estaba por la labor de disputar la carrera era los lesionados Pedrosa y Hayden, además de Gibernau y los que se unieron a ellos, como Stoner y Chris Vermeulen.