ñaki Dufour|MADRID
Un gol del uruguayo Juan Albín en los últimos minutos evitó la victoria del Atlético de Madrid, que se sintió ganador durante casi una hora con el 1-0 de su compatriota Diego Forlán, pero que concedió un empate ante el Getafe casi al final del duelo, cuando ya saboreaba su regreso a Liga de Campeones.
El 1-1, que significó un punto insuficiente para un aspirante a la zona alta de la clasificación como el equipo rojiblanco, amargó la «emoción especial» de Abel Resino en su regreso al Vicente Calderón, pero sobre todo evitó el ascenso del conjunto local a la zona 'Champions' seis jornadas después.
No era un partido fácil. Lo demostró el arranque del Getafe, ambicioso, sin miedo a amenazar la portería del argentino Leo Franco, que en el primer cuarto de hora vio como el uruguayo Albín enviaba un cabezazo al larguero y que salvó a su equipo con una ágil salida ante el nigeriano Uche, solo frente al portero.
No aprovechó el Getafe las dudas defensivas del Atlético, cuyas acciones ofensivas despertaron al grupo de Abel Resino, que ayer continuó su recuperación ofensiva, sobre todo al contragolpe, donde su verticalidad se transformó en dos ocasiones del argentino Maxi Rodríguez y del uruguayo Diego Forlán, solucionadas por los reflejos de Jacobo.
Todo estaba equilibrado hasta que un pase desde la derecha del griego Seitaridis, que puso su mejor centro al área en dos campañas y media como rojiblanco, lo remató Forlán en el 1-0. El delantero uruguayo ya le ha marcado seis goles al conjunto azulón en ocho duelos.
En la segunda parte el partido ya era del Atlético por marcador, fútbol y oportunidades ante un Getafe desaparecido ofensivamente en todo el segundo tiempo, sin riesgos para el argentino Leo Franco hasta que un penalti de Pablo Ibáñez sobre Casquero puso contra las cuerdas al equipo rojiblanco, aunque sólo durante unos segundos.
Fue el tiempo que tardó Albín en lanzar su penalti con tanta potencia como altitud, por encima de la portería local, para desesperación del Getafe y tranquilidad del Atlético, aunque sólo fue momentáneo, porque los últimos instantes, en el minuto 88, arrebataron dos puntos al Atlético con el 1-1.