Mateu Alemany Font (Las Palmas, 1963) ha estructurado en un tiempo récord un club del que sus ejecutivos huían de las oficinas y donde nadie se atrevía a dejarse ver por el palco. Su figura representa una visión moderna del fútbol, destila credibilidad y tanto la afición como el vestuario confían en su capacidad profesional para abanderar el nuevo ciclo en el que de forma ineludible tiene que entrar el Mallorca. Deportivamente los jugadores tienen que reaccionar y ganar partidos, el resto corre a cargo del nuevo jefe. Es un especialista en solucionar problemas y el que se trae entre manos es capital. Ni más ni menos que el futuro de la primera institución deportiva y social de las Balears.
-Su llegada ha sido determinante para encontrar la paz social en el seno del Mallorca. ¿Se ha cumplido el primer objetivo?
-Es mucha gente la que ha colaborado en esto, no sólo yo, hemos tocado muchas puertas y todas se han abierto y hay mucha gente que está ayudando y empujando en favor del club y esto traslada una imagen de integración, de mallorquinismo y de que la gente es consciente que el club está en una situación difícil en todos sus aspectos y todos queremos ayudar. Es un proyecto colectivo, no sólo de uno.
-¿Está satisfecho de la respuesta de la afición?
-A día de hoy se traslada a la opinión pública el mensaje de unión en estos momentos difíciles, de unión para ayudar al club y al equipo y esta sensación se comunica a la afición, que responde muy bien y espero que el domingo vuelvan a estar con nosotros. Ante el Deportivo es la primera final de las 17 que nos quedan y todas serán determinantes. Lo importante es saber de nuestras dificultades y ayudar al equipo en lo que podamos, dar un entorno de positividad al grupo y esto se está consiguiendo.
-¿Está más preocupado por los problemas deportivos que por los económicos?
-Todo va ligado y la situación es difícil en los dos aspectos, pero también tengo que decir que uno tiene la sensación de que hay una nueva disposición en favor del equipo y del club y esto es muy positivo.
-¿Ha encontrado ya la solución para paliar los problemas económicos que sufre la entidad y que son de una gravedad extrema?
-No la tengo todavía y estoy trabajando en hallar las soluciones económicas adecuadas Esta vinculación absolutamente indivisible entre lo deportivo y lo económico hace que sea totalmente trascendente mantener la categoría y en esto estamos. Es vital seguir en Primera División y evitar el descenso a Segunda.
-¿Tiene su presidencia fecha de caducidad o puede seguir más allá del 15 julio, día en la que expira su opción de compra?
-La verdad es que no me planteo mi situación más lejos que el 15 de julio, después pueden pasar muchas cosas y mi obligación o la meta que me he marcado es sacar al Mallorca de una situación complicada y tratar de planear un proyecto de futuro, en el cual tal vez esté yo o no. No me he planteado nada más. El proyecto del Mallorca tiene que ver con la estabilidad, una estabilidad que no tiene que ver con la personas sino con los proyectos y no me he planteado cómo quedará mi situación personal. Hay que tener preparado un proyecto de viabilidad del club y con una propiedad.
-¿Se puede cuantificar a día de hoy la deuda del club?
-Estamos pendientes de la auditoría, no puedo dar las cifras ahora y además vamos a hacer una proyección a 30 de junio. Lo importante es hacer una previsión para saber cómo puede cerrarse el ejercicio.
-¿Está cuestionado Gregorio Manzano?
-Tengo la sensación y creo que la tiene mucha gente de que todos somos culpables y no lo somos a la vez, pero hay una conciencia pública de que el entrenador ha demostrado de forma reiterada su cualificación para entrenar un equipo, el Mallorca tiene el título más importante de su historia con él en el banquillo y aquí ha demostrado sobradamente su capacidad para dirigir al grupo. Conoce la casa, los jugadores y no creo que sea problema de entrenador. Está superimplicado y trabaja mucho. En estos momentos no tengo duda respecto al entrenador.
-El equipo no termina de tomar impulso y es colista. ¿Teme que esta trayectoria pueda prolongarse?
-El ambiente en el vestuario se refleja en el terreno de juego y yo no dudo que en los cuatro o cinco últimos partidos el Mallorca ha mantenido una actitud muy buena en el campo, otra cosa es el acierto que pueda tener, pero con esta actitud hay que ser optimistas.
-¿Qué último mensaje envía a la afición del Real Mallorca?
-Vamos a incentivar a los socios y aficionados en todo lo que resta de temporada y les necesitamos como el pan, es un proyecto común y que tenemos que sacar entre todos. Este es el mensaje, que pase lo que pase estén con el equipo.