Los goles, la salsa del fútbol, fue lo único que le faltó ayer al Atlètic Balears frente a la Gramanet en un partido en el que el equipo de Francisco dominó de principio a fin, movió el balón con criterio, creó peligro por las dos bandas pero no estuvo acertado de cara a puerta. En unas ocasiones la falta de puntería y en otras las intervenciones del portero visitante Barragán evitaron que los blanquiazules se hicieron acreedores de los tres puntos.
La mejor ocasión de los locales en la primera parte llegó al filo del descanso, cuando Aarón cedió el balón de cabeza desde la frontal para que Rubio fusilara a Barragán, que rechazó el disparo y el posterior remate a bocajarro de Aarón.
En la reanudación, los de Francisco salieron decididos a por la victoria ante el conformismo colomenc pero no pudieron traducir en goles su mayor dominio sobre el terreno de juego. La acción más clara fue un remate de cabeza de Ramón a centro de Rubio desde la derecha que acabó en córner.