Geca Sport |VILLAGARCÍA DE AROUSA
El Joventut Mariana logró ayer en Vilagarcía de Arousa ante el Extrugasa su séptimo triunfo tras un partido en el que las de Jorge Méndez sólo temieron por la derrota en momentos puntuales del tercer cuarto, ya que en el resto del encuentro fueron mejores que un Extrugasa impreciso al que no le llegó con poner en liza pundonor y casta. El equipo de la Vall ha dejado apalabrada su presencia en la próxima edición de la Copa de la Reina al alcanzar el registro que habitualmente ha servido para competir en la cita que reúne a los ocho primeros clasificados de la primera vuelta.
El equipo balear comenzó fuerte el partido merced a su superioridad en el juego interior con Nieves Lamas y Murriel Page y tomó la primera ventaja importante, 2-8. El Extrugasa cometía demasiados errores a la hora de buscar a sus jugadoras interiores, pero aún así, cuando las encontró en buenas posiciones, llegó la reacción. El Extrugasa, de la mano de su último fichaje, Mandisa Stevenson, se mantuvo durante unos minutos cerca en el marcador, pero las visitantes pisaron el acelerador justo al final del parcial, con una inspirada Price, para cerrar el primer período con una cómoda renta (13-21).
De nuevo Stevenson permitió al equipo local albergar esperanzas de dominar el partido al inicio del segundo cuarto, pero las jugadoras de rotación del Sóller no estaban dispuestas a hacer concesiones y mantuvieron el tipo, 20-27. El Sóller, sin realizar un juego brillante, fue aumentando la renta hasta dejarla en la máxima de 30-42 al descanso.
El Mariana salió mucho más entonado que su rival al inicio del tercer cuarto. En tres minutos las baleares, merced a una incombustible Price, tomaron la mayor renta del encuentro, 30-46, que ya parecía dejar sentenciado. Pero al Extrugasa, aún con sus múltiples carencias, le sobra casta y pundonor.
El Sóller entró en barrena y encajó un parcial de 15-0. A las locales les empezaron a entrar los tiros exteriores, por lo que el partido tomó otro camino, el de la máxima igualdad.
Tan sólo Price devolvió a las baleares la ventaja al término del cuarto, 51-53.
En el último y decisivo parcial el equipo de Sóller se mantuvo por delante gracias a Price, Murriel y Castillo, pero fue incapaz de quebrar definitivamente el partido. En los últimos cuatro minutos, con las de Sóller sólo tres puntos arriba, la calidad y templanza acompañó a las de Méndez frente a unas jugadoras locales al que el empuje no le era suficiente.