Juan Antonio Lladós |INDIANAPOLIS
El italiano Valentino Rossi (Yamaha YZR M 1) se adjudicó la victoria en el único circuito en donde no lo había conseguido de todos los que forman el campeonato del mundo de motociclismo 2008, en Indianápolis, cuyo gran premio se disputó en unas condiciones casi dantescas.
Tras la prueba de 125 c.c. se tuvo que aplazar la de 250 c.c. por la fuerte lluvia que comenzó a caer sobre Indianápolis, que se disputaría tras la carrera de MotoGP, que aunque se inició a la hora prevista no se pudo completar el recorrido previsto a 28 giros.
Tal era el vendaval de viento que comenzó a soplar en el circuito de Indianápolis que algunas carpas instaladas en las zonas de entretenimiento de las instalaciones americanas comenzaron a volar por los aires con el consiguiente riesgo para las personas, como también los «air fence» que protegen los guarda-raíles de impactos de los pilotos, lo que situó la carrera en unas condiciones extremas literalmente insostenibles.
Con esos ingredientes comenzó a disputarse la prueba de MotoGP, en la que Valentino Rossi había sido el más rápido de entrenamientos, pero no así en la salida, en la que se vio sorprendido por varios pilotos, entre ellos el campeón del mundo australiano Casey Stoner (Ducati Desmosedici), el italiano Andrea Dovizioso (Honda RC 212 V), líder en la primera vuelta, y el ídolo local Nicky Hayden (Honda RC 212 V).
Jorge Lorenzo (Yamaha YZR M 1), que partía desde la primera línea, también hizo una buena salida y se colocó con el grupo de cabeza, no así Daniel Pedrosa (Honda RC 212 V), quien en esta ocasión, desde la tercera línea, no pudo hacer una buena salida, lo que le relegó a la sexta posición en la primera vuelta.
Después de ese giro inicial de Dovizioso en cabeza, fue Nicky Hayden el que decidió tomar la iniciativa y colocarse al frente de la carrera en la segunda vuelta, posición de privilegio que aguantó hasta el decimocuarto giro, justo en el ecuador del gran premio de MotoGP, cuando Rossi pasó al ataque y, tras superar al piloto de Kentucky, marcó su octava vuelta rápida de carrera.
Dio la impresión, como así fue, de que la prueba estaba ya vista para sentencia.
Rossi puso tierra de por medio, como pudo con el fuerte viento, y mantuvo una ventaja suficiente respecto de Nicky Hayden, al que acabó inquietando Jorge Lorenzo en las últimas vueltas que duró la carrera de MotoGP, pero cuando le iba a superar se acabó deteniendo la prueba por las malas condiciones climatológicas.
Ellos completaron las tres posiciones de podio, en tanto que Casey Stoner se tuvo que conformar con la cuarta plaza y Daniel Pedrosa, que acabó octavo, se vio superado «in extremis» por el francés Sylvain Guintoli (Ducati Desmosedici) y el australiano Chris Vermeulen (Suzuki GSV RR), al que pudo doblegar en la última vuelta contabilizada por la organización de la competición.