El Mallorca apuntala su defensa. El club balear, al que estos días se le amontona el trabajo en los despachos, pretende cerrar cuanto antes la configuración de la nueva plantilla y una de sus prioridades apunta a los sistemas de seguridad. Sin embargo, hoy mismo podría zanjar el asunto. Por un lado, la dirección deportiva de la SAD está a punto de concretar una nueva cesión del valencianista David Navarro y por otro, ha blindado definitivamente a José Carlos Nunes. Con eso arreglado, Nando Pons y sus colaboradores podrán dirigir sus fuerzas hacia otras zonas del proyecto. El inicio de Liga se esconde a la vuelta de la esquina (31 de agosto) y no hay demasiado tiempo que perder.
El regreso de David Navarro al ONO Estadi parece cuestión de horas. El del Puerto de Sagunto no cuenta para el técnico del Valencia, Unai Emery, y el Mallorca necesita al menos otro central que acompañe a los tres que hay ahora mismo en nómina (Nunes, Ramis y Crespí). Ante esa situación, la salida parece clara. Gregorio Manzano, que ya tuvo al valenciano a sus órdenes la temporada pasada, le ha dado el visto bueno a la operación y sólo quedan algunos aspectos por limar. De hecho, el vicepresidente deportivo del conjunto ché, Fernando Gómez Colomer, reconoció ayer que su salida de Mestalla está encarrilada: «Esperamos que se marche esta semana y va por muy buen camino». En principio el préstamo será para una única temporada.
Mientras tanto, la entidad mallorquinista anunció ayer una revisión del contrato de Nunes, al que se le ha mejorado la ficha y la cláusula de rescisión, que pasa a ser de quince millones de euros. El portugués, que tiene contrato con el club hasta el 30 de junio de 2011, era uno de los tres jugadores que pretendía llevarse a Inglaterra el West Bromwich Albion (WBA). El conjunto de Birmingham, que acaba de ascender a la Premier League, presentó la semana pasada una oferta para adquirir sus servicios, pero los dirigentes rojillos se cerraron en banda y no permitieron su marcha, ya que hubiera dinamitado los cimientos del vestuario.
Tras la negativa a la propuesta del WBA, el Mallorca dio un paso al frente y se puso en contacto con el jugador para reconocerle el trabajo que ha realizado estos últimos años en el ONO Estadi y premiar su entrega. «Estoy muy contento de quedarme, porque demuestra que el club y yo tenemos los mismos intereses, que son permanecer en la Isla durante mucho tiempo». Además, Nunes asegura sentirse muy cómodo en Palma: «Se está haciendo una plantilla muy competitiva, y lo demuestran los resultados y el juego exhibidos hasta el momento. Soy feliz».