Serio, más distante de lo habitual y visiblemente molesto con las informaciones que han ido apareciendo durante la semana. Manzano no está para bromas. El técnico jienense compareció ayer en la sala de prensa de Son Bibiloni para analizar el encuentro de mañana en San Mamés y aireó su enfado con un discurso marcado por la contundencia de sus palabras. El preparador del Mallorca afirma que no sabe nada del interés del Valencia y acusa directamente a los medios de provocar la situación actual. Además, ha vuelto a recuperar la ambición por alcanzar los puestos europeos y ha aplazado todos los movimientos relacionados con la confección de la próxima plantilla hasta que se agoten matemáticamente las posibilidades de jugar la UEFA. «No voy a cambiar mi rumbo, ni mi trabajo, ni mi destino, que es poner los cinco sentidos al frente del equipo que me paga y con el que tengo contrato en vigor. Sólo me preocupa ir a Bilbao a ganar», subrayaba de forma tajante.
El de Bailén no quiere que se siga especulando con su futuro y salió al paso de las informaciones que le sitúan en el banquillo de Mestalla: «No sé nada. Conmigo no ha hablado nadie y la situación es la que es. Me gustaria acabar bien el trabajo de esta temporada y que no se desvirtuara lo que hemos hecho hasta ahora. Cuando suceda algo, hay un presidente que lo sabrá, pero ahora mismo el presidente tampoco sabe nada».
Manzano ahondó en el asunto y argumentó su postura: «En el fútbol profesional vale todo. A veces se publican cosas que con el tiempo son ciertas, pero también otras que después resultan no serlo. Estamos en un mundo en el que hay una voracidad de noticias, ganas de producir noticias e incluso no habiendo noticias se especula con ellas, se crea opinión. Y al final preguntamos. Yo pienso que debería ser al revés. Primero se pregunta y si no hay noticia no debería publicarse nada. Así es el mundo del fútbol y el que lo rodea. Es lo que vende, pero deberíamos reflexionar todos».
El entrenador andaluz también tuvo tiempo de recular. Si el domingo, después del partido ante el Racing, abogaba por aparcar el «run run» de las aspiraciones europeas, ayer retomó el interés por los objetivos continentales. Es más, recordó que hasta que no se hayan consumido todas las posibilidades no fijará la vista en la temporada que viene: «No vamos a mover ninguna situación particular con ningún jugador», destacó al referirse a los futbolistas que acaban contrato el 30 de junio. «Aunque está difícil, todavía hay posibilidades matemáticas de llegar a Europa y lo que queremos es luchar hasta el último minuto por una plaza. No queremos interferir en nada para que los jugadores estén implicados en este objetivo. Pero todo parte por ganar en Bilbao. El equipo está teniendo un comportamiento ejemplar en esta segunda vuelta e intentaremos mantener la línea. Si ganamos, ya miraremos la tabla», concluía.