Fernando Fernández ¿La sexta será la vencida? La solución al eterno dilema que rodea al COP Crespí la tendremos en la tarde del sábado 3 de mayo. Eso si la historia del pasado curso no se repite. Cinco precedentes han hecho de la entidad de la Vall el eterno aspirante al ascenso a la Liga Femenina. En la segunda campaña de Jorge Méndez en el banquillo de Es Puig, y con las maletas hechas para mudarse a Son Angelats, el histórico Joventut Mariana vuelve a depositar las ilusiones de una directiva y una afición ejemplares en cinco días que definirán un año más el porvenir de una entidad que merece un hueco en la máxima categoría del baloncesto femenino. Por su constancia y la capacidad de reacción que ha exhibido tras encajar durísimos golpes. Siempre están ahí. Rivas, por partida doble, León, Ferrol y el pasado curso una mala mañana ante el Caja Rural de Zamora, redactan la leyenda negra de la que el COP Crespí quiere desprenderse.
Para ello, Méndez exhibe un plantel que ofrece centímetros, muñeca y maestría en la dirección. En los albores de la fase de ascenso, que arranca el miércoles 30 en Santiago de Compostela (el anfitrión será el Pío XII), las jugadoras y el cuerpo técnico del COP Crespí-Joventut Mariana posaron para Ultima Hora a bordo del Tren de Sóller y en algunos de los rincones más emblemáticos de la ciudad, con las miras puestas en sellar el objetivo que desde el tropiezo en La Seu se empezó a maquinar.
La semifinal había sido la barrera natural que el destino había fijado para el Mariana. Hasta que el pasado curso, un mal despertar y un Zamora inspirado desde 6'25 marcaron el principio del fin del sueño, que quedó rubricado frente al Badajoz, apeando a las mallorquinas en la primera fase. Desde ese momento, comenzó a cocinarse el proyecto más ambicioso. Sólo Laura Villaescusa y María Moreno repiten, como cimientos de un vestuario que ha logrado finalizar el curso regular como campeón del Grupo B, con un balance impresionante. Dos derrotas en veintiséis partidos, un registro sólo superado por Rivas (04/05, 25-1), les hacen aterrizar en la cancha del Pío XII nuevamente con el cartel de favoritos. Argumentos les sobran en la plantilla. La pareja de bases pasa por ser la mejor de la competición. Villaescusa es un lujo y el regreso de Gabi Ocete ha otorgado el toque de calidad necesario para una posición clave. En el perímetro, Esther Morillo y una infalible Charlene Smith han justificado su incorporación, que ha hallado complemento en una Carla Freitas que bien sabe lo que es subir. La portuguesa, junto a Traore, Llamas, Villaescusa y Ruiz han ascendido con anterioridad (todas menos la última ante el Mariana). Moreno es toda una garantía en su posición, mientras que en la zona, los centímetros de Palaimaite, Traore (máxima anotadora), Saray Ruiz y una clásica como Nieves Llamas no dejan margen para el error.