La reconquista del cetro de la tierra empieza en Montecarlo. Rafael Nadal puso ayer rumbo al Principado de Mónaco para retener la corona del tercer Masters Series de la presente campaña e iniciar un exigente recorrido por el viejo continente que culminará con el reto de conquistar la cuarta Copa de los Mosqueteros en Roland Garros. Los primeros títulos sobre arcilla están en juego en Valencia y Estoril, pero, tras su participación en la eliminatoria de cuartos de la Copa Davis, el número dos del mundo ha velado armas en Manacor acelerando su adaptación a su superficie predilecta en la que puede presumir de 81 victorias consecutivas.
Después del mayor paréntesis de éxitos desde que estrenó su palmarés en 2004 en el torneo de Sopot, Rafael Nadal se dispone a irrumpir en la temporada de tierra batida tras haber completado el que paradójicamente ha sido su mejor inicio de curso sobre pista rápida tras alcanzar las semifinales en el Open de Australia y el Masters Series de Indian Wells y haber sido finalista en el torneo de Chennai y en el Masters Series de Miami.
Rafael Nadal ha salido victorioso del Montecarlo Country Club en los tres últimos años (2005, 2006 y 2007) y aguarda su estreno en el Principado, que podría producirse el martes o el miércoles, después de no haber dispuesto del tiempo deseado para preparar el cambio de superficie.
El número dos del mundo vislumbra en el horizonte el tramo del calendario más exigente. A excepción del Masters Series de Hamburgo, Rafael Nadal cuenta con tres triunfos en los diferentes torneos a los que acudirá entre abril, mayo y junio. El mallorquín defiende 2.650 puntos merced a sus victorias en Montecarlo (500), Barcelona (300), Roma (500) y París (1.000) y la final alcanzada en Hamburgo (350), donde Roger Federer ha conseguido la única victoria ante el manacorí sobre tierra batida.
El suizo, Igor Andreev y Gastón Gaudio son los únicos jugadores que han conseguido superar al mallorquín sobre polvo de ladrillo desde el inicio de la temporada 2005. A lo largo de estos tres años Rafael Nadal dejó para la historia una racha de 81 victorias seguidas sobre tierra batida que precisamente tuvo su punto de partida en el Masters Series de Montecarlo en 2005.
La superioridad exhibida sobre tierra batida en el último trienio vuelve a colocarle en todas las quinielas posibles. Sus rivales e incluso ex jugadores de la talla de Bjorn Borg se han apresurado en colocarle la vitola de favorito para la temporada de tierra. Los números le dan la razón a los que apuestan por el mallorquín, pero su presume una tarea muy complicada completar un recorrido prácticamente inmaculado como el de ejercicios anteriores.
Estrenar y engordar el palmarés y mantener las distancias sobre Roger Federer y Novak Djokovic serán los objetivos de los próximos meses. El objetivo del número uno será complicado debido a los muchos puntos que defiende Rafael Nadal, pero tampoco hay que perder de vista los que defiende Roger Federer, que fue la víctima habitual del mallorquín en el último año sobre la tierra batida de los escenarios que ahora cobran protagonismo en el circuito.
Tras Montecarlo, Barcelona será la siguiente estación y dos nuevos Masters Series aumentarán la exigencia antes de una semana de descanso antes de que París se convierta en el epicentro del planeta tenis. Nadal podría regresar a Mallorca los días previos a su cuarta participación en Roland Garros en un año en el que no se disputará la exhibición en la Costa d'en Blanes.