Brigit Yagüe demostró quién es la mejor taekwondista europea en su peso (-51 kilos). La mallorquina, doble campeona mundial y vigente poseedora del entorchado, recuperó el cetro continental y se reivindicó tras quedarse fuera de los Juegos Olímpicos de Pekín. Con ganas de revancha, Yagüe salió a por todas en el Europeo que se disputa hasta el domingo en la Palalottomatica de Roma y obtuvo justa recompensa con un oro que recompensa un año difícil. No fue un camino asequible, aunque en su primer combate, Yagüe exhibió sus credenciales (7-1) ante la moldava Svetlana Vitu, que apenas ofreció resistencia. La croata Lucija Zaninovic tampoco pudo con una Brigit sensacional (2-3), que tenía que apretar los dientes, pero que se plantaba en cuartos de final por la puerta grande, evitando en semifinales a la sueca Hanna Zajc, la gran favorita, que fue eliminada a las primeras de cambio por la rusa Soboleva por un ajustado 1-2. En la ronda previa a lucha por las medallas, la turca Sevde Mavi se erigió en obstáculo de la balear, aunque la líder del equipo español no se apiadó y ofreció lo mejor de su repertorio (1-6) para obtener una plaza en las semifinales.
Allí le esperaba la francesa Maeva Coutant, campeona europea júnior, que en cuartos había barrido (0-7) a Soboleva. Quedaba un combate para la final y ahí apareció la versión más fiable de la campeona mundial, que con un ajustado 1-2 se plantaba en la gran final y se aseguraba la plata. En el combate decisivo, la británica Carolina Fisher no pudo hacer nada ante la española (7-3), que remontó un 1-3 en contra y apuntilló a su rival. El bronce fue a parar a manos de la israelí Anna Mirkin.
Después de cuatro años, Yagüe vuelve a coronarse como campeona de Europa, aunque es la primera vez que lo logra en este peso, un resultado que le da una enorme dosis de moral. «Venía desanimada tras el Preolímpico, pero esto me ayuda a mirar adelante, al Mundial. Tenía ganas de demostrar muchas cosas y, aunque me he encontrado extraña (especialmente en referencia a los petos electrónicos), tras ganar el primer combate he visto que la cosa podía ir bien», explicó Brigit, quien tras la competición estaba «reventada, pero muy feliz, lo necesitaba», dijo. La balear contempla esperanzas de obtener una wild card para Pekín, aunque tendrá que aguardar hasta el 12 de junio y las posibilidades son pocas a estas alturas.
Hoy entra en acción el otro mallorquín en liza, José Luis Méndez que participa en el peso gallo (-62 kilos). Su primer oponente será el croata Filip Grgic.