Gregorio Manzano quiere que la maldición de Mestalla caduque este mismo fin de semana. El entrenador del Mallorca reconoce que hay una serie de plazas que habitualmente interrumpen el camino de los isleños por el campeonato, pero cree que hay posibilidades de quebrar esa tendencia antes de que se siga expandiendo. «No será fácil porque nos enfrentamos a un equipo potente y al alza, pero nosotros llegamos en un buen momento ¿Por qué no podemos romper la dinámica?», apunta esperanzado.
El técnico jienense ve en el Valencia a uno de los peores rivales posibles a estas alturas de la competición. Los dos equipos se enfrentaron justo antes de que Ronald Koeman cogiera los mandos de la nave levantina y desde entonces en Mestalla ha pasado de todo. Sin embargo, disfrutan ahora del mejor momento de la temporada y se han afilado las uñas con dos prestigiosos triunfos ante Barcelona y Madrid. Un peligro. «El hecho de llegar a una final de Copa de forma merecida le ha dado una carga de confianza tremenda. Tienen la moral muy alta, creen en ellos y, a priori, el partido se nos ha puesto mucho más complicado que sencillo. De no haber ganado sus últimos compromisos quizá estaríamos hablando de un Valencia nervioso y metido en un entorno de malestar, pero no es así. Es otro problema añadido que encontraremos».
En este sentido, Manzano recuerda que lo único que ha cambiado en el vestuario ché es el estado de ánimo. «Cuando los resultados acompañan los jugadores parecen más altos y más guapos. Villa, Silva, Baraja o Maduro siguen siendo los mismos., aunque ahora han soltado las piernas y la cabeza y se atreven a hacer cosas. Nosotros debemos pensar con la cabeza y ejecutar con los pies, no caer en sus trampas y volvernos de vacío. Con inteligencia y personalidad».
De lo que no se fía el entrenador andaluz es de los números que ha firmado el Valencia como local, los peores de su historia: «Es cierto que el Valencia no ha estado bien en casa, pero eso ya es pasado y sólo sirve para comentarlo», destaca. De Villa, en cambio, no opina lo mismo: «Es un delantero que, pese a no tener esta temporada la eficacia goleadora que se corresponde a su categoría, puede decidir un partido en cualquier momento, como hizo el otro día con España. Hay que tener bastante cuidado con él».
Manzano subrayó además que a pesar de que al Mallorca le bastaría con sumar dos triunfos para asegurar la salvación, no va a conformarse: «Estoy seguro de que ganaremos más de dos partidos».