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El Palma cayó en su visita a Alicante (93-88), en un encuentro dominado desde el primer minuto por el conjunto de Quim Costa, aunque como ocurre de forma sistemática en las últimas jornadas, el cinco levantino venció con mucho sufrimiento en los últimos instantes del choque y con el rival apretando tratando de conseguir la remontada. El cinco local anotó 10 de 16 triples intentados, lo que supuso una de las claves para que la victoria se quedara en el Centro de Tecnificación. Con la victoria y el pinchazo del CAI Zaragoza, se ha formado un grupo de tres equipos en cabeza, formado por el propio Alicante, el equipo maño y el Bruesa, lo que da buena cuenta de la igualdad de la liga.
Por su parte, el Palma sigue en la zona media de la clasificación, aunque no puede despistarse en los próximos compromisos si no quiere ver como se complica su situación. El equipo Colino llegaba a la cita lanzado en la tabla, con Rejón y Kornegay cono dos de sus puntales bajo la pintura, pero que no fueron argumento suficiente para anular la aportación de Digbeu, la referencia del choque.
El primer cuarto sirvió para que el equipo local marcara las distancias. El Palma salió muy metido, y los de Quim Costa funcionaban bien en defensa y con un nivel aceptable en el porcentaje anotador comenzaron a distanciarse en el último tramo, pasando del 17-17, a cerrar el primer periodo con un 24-17 en su haber.
A partir del segundo cuarto, el partido se igualó. El buen hacer de los alicantinos se fue diluyendo y sólo Digbeu conseguía mantener cierto nivel ante un Palma que iba de menos a más y fue recortando la renta paulatinamente. No obstante, de nuevo un acelerón del equipo local en los últimos instantes antes de la llegada del descanso dejó las cosas como prácticamente como estaban.
En el tercer periodo, se volvió a ver a un Alicante más incisivo, dispuesto a cerrar cuanto antes el encuentro. Los de Costa sabían que no podían fallar, pero tras aumentar la renta a diez punto, lo pasaron mal en los últimos diez minutos. El Alicante se volvió a atascar en ataque y el Palma, con poco, le puso en problemas. De hecho, a un minuto de la conclusión, el equipo balear se puso a cuatro puntos (89-85), lo que puso muy nervioso al Costa Blanca. Rejón, Terrell, Pacreu y un Schutte inspirado desde el perímetro se encargaban de poblar de incertidumbre el ambiente en el Centro de Tecnificación, aunque los locales tenían el partido de cara.
Al final, el equipo de Costa supo mantener la calma y administró la renta en los últimos segundos del partido para certificar definitivamente una victoria vital 93-88, que sitúa al Alicante en la zona noble de la clasificación y frena en seco la progresión de un Palma que mostró buenas sensaciones en una cancha difícil.