Una bocanada de aire fresco en forma de contrato de televisión entró ayer en la caja fuerte del Real Mallorca. El acuerdo de renovación de patrocinio firmado entre el presidente de la SAD balear, Vicenç Grande, y el director general de IB3, Antoni Martorell, le permite al club isleño divisar el futuro con los bolsillos llenos. O al menos con el aval suficiente como para acabar la temporada sin ninguna urgencia monetaria.
El acuerdo de ayer, que engloba el trienio 2010-13, supondrá un espaldarazo económico importante para la entidad, que recibirá 12 millones de euros en tres temporadas. Además, el ente autonómico tendrá una opción preferencial para adquirir los derechos audiovisuales a partir del verano de 2013, cuando expira el contrato del Mallorca con Mediapro.
El club balear se ha comprometido a negociar los derechos televisivos con IB3 antes de establecer conversaciones con un tercero. Las negociaciones para la renovación de dichos derechos debe quedar concluida, según fijaron ayer ambas partes, antes del 1 de enero de 2013.
La firma le permite al Mallorca disponer de un respaldo notable a la hora de acudir a los bancos y recibir inyecciones de dinero sin necesidad de someterse a nuevas operaciones financieras, una práctica habitual en la mayoría de los clubes de la Liga de Fútbol Profesional.
El acuerdo establece que durante la primera campaña no habrá incremento económico, es decir, se mantienen los 3'5 millones de euros, que se verá incrementado en medio millón de euros más para concluir, en la campaña 2012-13, con un importe de 4'5 millones de euros.