Gregorio Manzano quiere que su equipo vuelva a enchufarse a la Liga y aparque la euforia copera. El hecho que el encuentro frente al Levante quede enquistado entre la victoria conseguida el miércoles en el Bernabéu y la ida de los cuartos la próxima semana en Getafe, hace que el preparador andaluz envíe un mensaje de atención tanto al vestuario como al entorno del club.
Sin embargo, el técnico no lo tuvo fácil en su comparecencia de ayer ante los medios de información, más preocupados por conocer nuevos detalles en torno al conflicto con Schuster que no en hablar del equipo 'granota'. El andaluz dio por «zanjado» el litigio con el alemán y recordó que «tenemos el partido de Levante a menos de 48 horas».
«El rival de mañana hace siete días recibió al líder -el Real Madrid- y en el minuto 70 el resultado era de empate a cero. Esta es la última referencia que tenemos y el partido tuvo que romperse a través de un penalti», explicó Manzano para dar a entender que, pese a las condición de colista del rival, no será un partido fácil.
«Nos jugamos tres puntos muy importantes y lo haremos ante un rival que no es de segunda línea, es de Primera División y los futbolistas, pese a estar abajo, tienen su amor propio y también saldrán a ganar el partido», advirtió el técnico andaluz.
El preparador del Mallorca insistió en el hecho de que no tendrá nada que ver el partido de mañana ante el Levante con el encuentro disputado el miércoles en el Bernabéu. «Espero que no nos abrumen tanto», comentó. «Nuestro objetivo es ganar, que nos hace mucha falta, llevamos mucho tiempo sin conseguir una victoria y es necesario sumar para no pasar apuros y afrontar la semana que viene el partido de cuartos con garantías», subrayó el técnico del Mallorca. El equipo balear encadena seis partidos sin ganar. La última victoria se remonta al pasado 24 de noviembre. Ese día el conjunto balear ganó en el Pizjuán ante el Sevilla (1-2). A partir de ahí empató tres partidos -Murcia, Athletic y Zaragoza- y perdió contra Racing, Atlético Osasuna y Barcelona. De ahí que Manzano prácticamente exiga volver a reencontrarse con las victorias.
Por este motivo el entrenador andaluz no tiene previsto rotar en exceso al equipo, es decir, no reserverá a ningún futbolista pensando con el choque que se jugará contra el Getafe. «Este partido queda ahora muy lejos», dijo Manzano. «Buscaré una alineación para ganar. Como he dicho el partido del miércoles es ahora secundario y el de mañana prioritario», subrayó. Sin embargo, matizó también el andaluz, que la sobrecarga de partidos motivará que dosifique a algunos de sus futbolistas, es decir, que algunos no jueguen completos los noventa minutos. Pese a tratarse de un partido que se podía calificar de 'incómodo', Manzano negó que se tratara de un partido «trampa». «Es un partido para ganar sí o sí, sin faltar al respeto a unos futbolistas que son de Primera División», dijo. Por último, y a raíz de los últimos acontecimientos, el técnico insitió en el hecho de mantener la «humildad». «Esta es nuestra bandera y vamos a ir con toda la humildad del mundo, somos normales», precisó Gregorio Manzano. Respecto al interés de la Real Sociedad en lograr la cesión de Víctor Casadesús, el entrenador del Mallorca negó la salida del jugador e insistió en su idea de que «mientras estemos en la Copa, de aquí no sale nadie. Sólo si viene un magnate ruso y paga la cláusula el jugador se marchará».