Efe |BARCELONA
El nuevo Barça, sin Ronaldinho ni Deco y con problemas en la posición de mediocentro, se pondrá a prueba ante un Murcia que nunca ha ganado en el Camp Nou con la imperiosa necesidad de sumar una victoria para no perder aún más la estela del líder.
Después de que se haya quejado tras el encuentro ante los hispalenses del rendimiento de tres jugadores, el holandés realizará cambios en defensa y en el centro del campo.
La baja de Edmilson, lesionado en Sevilla, y la de Touré Yayá, que se encuentra convocado por Costa de Marfil para disputar la Copa de Àfrica, suponen un quebradero de cabeza para Frank Rijkaard, quien sólo dispone de Márquez para ocupar esta posición.
El mexicano jugó hace unas temporadas en la posición de mediocentro defensivo y lo hizo con éxito, pero últimamente ha lucido en el eje de la defensa, donde se ha hecho con un puesto al lado de Milito.
Además, el pase de Márquez a esa posición supondrá un movimiento correlativo de fichas. Puyol, asiduo del lateral derecho en los últimos partidos, podría descansar; Thuram sería el acompañante de Milito en el eje, mientras que Zambrotta es el único lateral derecho que le queda en nómina a Rijkaard.
Todo apunta a que Xavi o Iniesta descansarán. Ninguno de los dos pasa por su mejor momento y además Rijkaard ya ha anunciado que reservará efectivos. Por ese motivo, Gudjohnsen podría tener su oportunidad.
En la delantera, Rijkaard no hará cambios y volverán a jugar de inicio Etoo, Henry y Giovani.
El Murcia afronta el partido con las bajas por lesión de Gallardo y Regueiro y la duda de Rosinei.