Efe|MADRID
Sergio Ramos, defensa internacional del Real Madrid, no se entrenó ayer por un golpe sufrido ante el Real Zaragoza pero podrá jugar el jueves ante el Mallorca en Copa del Rey, partido que será el primero que se pierda el maliense Mahamadou Diarra que en la mañana de ayer se despidió para disputar la Copa de Àfrica.
La lesión de Gabriel Heinze ante el Real Zaragoza, rotura del músculo bíceps femoral de su pierna izquierda, le mantendrá de baja mes y medio. Unido a los problemas de la fascitis plantar de Christoph Metzelder y el esguince de tobillo de Fabio Cannavaro, hacen que el estado de Ramos sea clave para el partido en Mallorca.
Es seguro que Pepe regresará tras superar un pequeño problema muscular y la fuerte gripe que le debilitó en el inicio de año y provocó que Bernd Schuster le reservara el pasado domingo.
Ramos no saltó al césped en la mañana de ayer por precaución. Según confirmó el propio jugador al abandonar Valdebebas, sufre un golpe y se ejercitó en el gimnasio. Hoy se probará junto a sus compañeros y en principio no habrá problema para que sea titular mañana en el ONO Estadi. Luego, descansará en Liga, ante el Levante, por sanción.
Con la línea defensiva entre algodones, el Real Madrid volvió al trabajo tras disfrutar de un día de descanso. Heinze comenzó el proceso de recuperación de la nueva lesión que sufre, la tercera desde que llegó al Real Madrid a finales de verano. Mientras, Cannavaro trabajó en la piscina y recibió masaje para tratar el esguince de su tobillo izquierdo que le descarta para Mallorca pero no para el encuentro del próximo domingo en Valencia ante el Levante.