Miguel Luengo|SHANGHAI
Rafael Nadal y David Ferrer afrontan hoy jueves su día crucial en la Copa Masters de Shanghai en el que esperan lograr su pase a las semifinales, sin necesidad de conjeturas y cábalas, si no superando al serbio Novak Djokovic y al francés Richard Gasquet, respectivamente. El manacorí entrará en acción a partir de las 10:00 hora española y a continuación saltarán a la pista el de Jávea y el jugador francés, que jugarán un duelo trascendental en las aspiraciones del número dos del mundo de seguir vivo en la lucha por el último título del año.
Muchas son las posibilidades en este Grupo dorado, dependiendo de los resultados, pero si ambos vencen tendrán el billete asegurado y dejarán aparcada la calculadora, que sería necesaria para tener en cuenta todas las carámbolas que pueden producirse.
El que mejor lo tiene es el alicantino David Ferrer, con dos victorias ya conseguidas ante Novak Djokovic y Rafael Nadal, y además se enfrenta con Gasquet a quien viene de derrotar en la final de Tokio (pista dura) recientemente. Pero el jugador de Xavea no se fía. «El jugó muy mal aquel partido, pero esta vez será diferente. Está jugando muy bien, ha vencido a Djokovic y lo hizo muy bien contra Rafa. Creo que será un partido muy complicado», aseguró David Ferrer.
Ambos se han enfrentado en dos ocasiones, la mencionada final de Tokyo y los octavos de final de Stuttgart (tierra) en 2004. En ambas Ferrer venció en dos sets de forma concluyente.
El desparpajo de Ferrer en la pista, uno de los cuatro debutantes este año en Shanghai, quedó patente en las palabras de Nadal cuando dijo de él que se encuentra «en estado de gracia», e incluso se atrevió a señalarle como un candidato al triunfo final.
Nadal, que había comenzado con una victoria sobre Gasquet en tres sets, se ve obligado a ganar a Djokovic ahora, aunque el serbio, ya sin nada que contar en Shanghai y falto de fuerza por su extenuante temporada podría haber bajado los brazos.
Pese a todo, no sería nada extraño que el de Belgrado quisiera echar el resto en su despedida de su primera Copa Masters y opusiera una férrea resistencia a Nadal, con quien tiene un balance desfavorable de 5-2, (4-2 este año para Nadal), aunque ganó el último partido al español en las semifinales de Montreal, por 7-5 y 6-3.
El sueño del tenis español, que colocó a dos finalistas, Alex Corretja y Carlos Moyá en la lucha por el título en Hannover en 1998, podía repetirse en Shanghai este año, de ahí la importancia de la jornada de hoy. El tenista catalán, actual comentarista de Televisión Española, se alzó con el triunfo después de que el jugador palmesano se anotara las dos primeras mangas de la final. Corretja le devolvía así a Carlos Moyà la Copa de los Mosqueteros que le arrebató, ya que en la campaña 1998 el jugador mallorquín se enfrentó al catalán en París con un gran triunfo para el que posteriormente sería el número uno del mundo.