Carlos Román|MADRID
El presidente del Real Mallorca, Vicenç Grande, se mostró «enfadado» por no haber salido del Bernabéu con un punto como mínimo, si bien evitó cargar contra el colegiado del partido. En declaraciones a IB3 TV a la conclusión el encuentro, el máximo accionista del club manifestó que «del árbitro son ustedes quienes tienen que opinar -refiriéndose a los periodistas-, pero me voy decepcionado. Este partido al menos debíamos haberlo empatado y creo incluso que debíamos haber ganado. Jugamos tan bien o mejor que el Madrid y perdimos. Esto es el fútbol, pero me voy enfadado», dijo. Respecto al penalti no señalado en el área del Madrid y al gol en fuera de juego dado por válido, Grande dijo que «pudo haber sido un dos a cuatro a favor nuestro, pero yo no opino de los árbitros. Me voy con mal cuerpo. Nuestros aficionados deben estar contentos porque el Mallorca ha jugado un buen partido», subrayó. Sobre las quejas arbitrales del Madrid, que por lo que se ve han dado resultado, Grande dijo: «La fuerza mediática que tienen equipos como el Madrid o el Barcelona no es la que tenemos nosotros. Hemos perdido, hemos jugado bien y merecimos ganar», concluyó el presidente del Mallorca.
Por su parte los futbolistas salieron satisfechos del vestuario por el trabajo desarrollado, pero con la lógica sensación de rabia que produce haber tenido tan cerca un resultado tan positivo ante el líder. Los bermellones se mordieron los labios para esquivar la polémica arbitral, aunque el capitán Ballesteros
El protagonista del encuentro Fernando Varela, que se congratuló por las buenas actuaciones que acumula en el Bernabéu, resaltó el «gran trabajo» del grupo de Manzano y apuntó que los rojillos se van «con mal sabor de boca por no puntuar». Sobre las claves del choque explicó que «deberíamos haber estado más cerrados tras el 2-3 y aguantar atrás. Nos hemos dedicado más a atacar que defender y deberíamos haber juntado las líneas y que no nos crearan tanto peligro».
Borja Valero, que se mostró satisfecho por su estreno en la que fue su casa y que se llevó de recuerdo la camiseta de Raúl, coincidió en señalar que la clave estuvo tras la remontada: «Cuando metimos el 2-3 nos tendríamos que haber replegado para que no nos pillaran contra, pero esto es fútbol y no hay que darle más vueltas». Además, también añadió que «da mucha rabia porque marcar tres goles fuera de casa y no sumar es malo, pero el trabajo salió bien y debemos mirar hacia adelante». En cuanto a las actuación arbitral el canterano madridista explicó que «tampoco hay que echarle la culpa al colegiado y sí hay que echársela a los que estamos en el campo».
Dani Güiza, que sentía las sensaciones entremezcladas de acostarse como pichichi nacional, de su flamante internacionalizad e inminente paternidad con la derrota, señaló que el Mallorca debe estar «contento por el trabajo» a pesar de sentir «rabia por remontar y que luego te metan dos más». Sobre el colegiado señaló que «tampoco podemos hacer más, porque somos el Mallorca y no el Madrid».
En la misma línea se pronunció Sergio Ballesteros, que señaló «El equipo ha dado una buena sensación y nadie puede decir que no le plantó cara al Madrid. Se puede mejorar, está claro, pero dentro de la tristeza creo que el equipo ha hecho un papel digno». Algo más irónico se mostró al referirse a la actuación de Fernández Borbalán: «Dirán que han remontado y que son unos fenómenos, pero ya sabemos a lo que venimos cuando jugamos en el Bernabéu».