El Bàsquet Muro firmó su segunda derrota de la temporada en la cancha del que fuera su verdugo en los pasados play offs de ascenso a la LEB, un Akasvayu Vic que en el primer y el tercer cuarto dinamitó el encuentro con un baloncesto contundente y haciéndose fuerte en el rebote, uno de los puntos más endebles el pasado sábado de los murenses, que reaccionaron en el último cuarto, pero el Vic ya contaba con un importante margen de maniobra a esas alturas (54-40).
Jiménez, Sabat y Báez, este último en especial bajo los tableros, fueron una pesadilla para el conjunto mallorquín, en el que la aportación de Sergio Riera desde el banquillo fue la nota más destacada, además de los números de Cage y Sergio Rodríguez y la aportación reboteadora de Bonds.
Pese a ello, el Bàsquet Muro sigue sin saber lo que es ganar esta temporada y empieza a ver la parte baja de la clasificación demasiado cerca, pese a la calidad de un plantel que echó de menos la aportación de algunos de sus mejores efectivos para intentar conseguir una victoria de calidad en una cancha que se les atraganta.