La Liga entra en juego en Son Moix. El Mallorca 2007-08 saldrá esta tarde del garaje para incorporarse a la carretera del campeonato y recorrer los primeros kilómetros del viaje ante su esperanzada afición. En su parada inicial, los hombres de Gregorio Manzano se someterán a una revisión obligada, ejercerán de anfitriones ante uno de los equipos más influyentes de su historia reciente e inaugurarán oficialmente el proyecto más ambicioso de los últimos tiempos. En otras palabras, comienza el baile (ONO Estadi, PPV 19:00 horas).
El encuentro sorprende al equipo local en un gran momento, quizá el más dulce desde que se cerró por última vez la ventana. A los baleares les ha sentado especialmente bien el verano y llegan al kilómetro cero del ejercicio con los pulmones llenos y la moral reforzada. La plantilla que despidió el curso pasado entre sonrisas apenas ha sufrido desperfectos y se ha enriquecido con una serie de futbolistas llamados a paliar las carencias más habituales de la versión anterior. Los cambios han tenido un efecto casi inmediato y el grupo ha superado sin problemas el inevitable periodo de rodaje. La mejor muestra de ello es su impecable pretemporada: 8 partidos, 5 victorias y 3 empates. Los propios protagonistas se han apresurado a quitarle hierro a esos datos para evitar una euforia injustificada, pero lo que nadie puede poner en duda es que la dinámica ha alimentado la autoestima del vestuario para situarla a unos niveles desconocidos. Ahora sólo hay que refrendarla y levantar la mirada sin complejos.
Superioridad
Para conseguirlo, el Mallorca está obligado a estrenar su cuenta corriente a costa del Levante. Aunque las referencias actuales son mínimas, los granotas llegan al partido algo tocados. Su convulsa pretemporada ha sacudido las paredes del vestuario mucho antes de lo previsto y el técnico al mando de la nave, Abel Resino, ya ha tenido que intervenir para apaciguar los ánimos. De hecho, el cuadro valenciano acogió el pasado viernes la primera conjura de la campaña y aunque los jugadores afirman que el bache veraniego está en un segundo plano, da la sensación de que parten con cierta desventaja.
A nivel deportivo, Manzano ya le ha sacado brillo a su once de etiqueta. Recuperados para la causa Pierre Webó y Dani Güiza, el entrenador de Bailén podrá recurrir a varias propuestas a la hora de plantear el partido. De momento, en la primera convocatoria del curso figuran los diecinueve futbolistas disponibles y el jienense se ha guardado un as en la manga para evitar sorpresas de última hora, sobre todo después del susto que protagonizó ayer Jonás. Así, los únicos que se han quedado al margen de primera la lista son los sancionados Víctor (el de Algaida sufría además una fuerte contusión en la pierna izquierda y no podrá reeditar sus registros de la 2006-07, en la que participó en todos los encuentros) y David Navarro, y los lesionados Molinero y Dorado, que se hallan inmersos en pleno proceso de recuperación.
Lo que no fallará es la afición. Y es que los 14.500 abonados que se han enganchado al equipo están ansiosos por divertirse. Esto promete...