David Navarro empieza en Mallorca una nueva etapa. El club que preside Vicenç Grande le ha dado la oportunidad para que se vuelva a hablar mucho de su faceta como futbolista y se olvide la mancha que tiene en su expediente por esa agresión a Burdisso en un partido de Liga de Campeones disputado entre Valencia y Inter.
Ayer, ineludiblemente, salió a relucir esta cuestión en su presentación como nuevo jugador del Mallorca. «Eso fue algo único, que nunca he hecho en mi vida. Llevo siete años en Primera División y nunca he sido expulsado. Eso que ocurrió fue porque los nervios me traicionaron, perdí la cabeza y actué de esa forma. Me arrepentí a los cinco minutos, como ya dije en su día. Eso forma parte del olvido y ya no está en mi cabeza», comentó el futbolista. La UEFA le sancionó medio año, y este castigo finaliza el 14 de septiembre, por lo que podrá entrar en el equipo de cara al partido que el Mallorca y el Villarreal jugarán en la tercera jornada del campeonato liguero. En su opinión, la oferta del Real Mallorca le convenció por el juego que le vio desplegar en la parte final del campeonato. «La segunda vuelta del Mallorca fue espectacular jugando un fútbol que a mí me gusta mucho y creo que eso y la filosofía del club en su trabajo me terminó de convencer», comentó.
David reconoció que la situación se solucionó en apenas unos días «porque todas las partes nos pusimos de acuerdo muy rápido»