Hay conflicto a la vista. La Real Federación Española de Fútbol celebra hoy su asamblea ordinaria en la que deben tomar parte todos los asambleistas de España. Sin embargo, varias comunidades tienen previsto no acudir a la cita con el presidente Àngel María Villar y entre las que no acudirán a la asamblea se encuentra la Balear. Los asambleistas de la Isla, encabezados por el presidente de la Federació de Fútbol de les Illes Balears (FFIB), Miquel Bestard, han tomado la decisión de no asistir en «protesta por las reiteradas actuaciones contrarias a los intereses de la FFIB», según reza el comunicado hecho ayer por los asambleistas de Balears.
El documento no entra en detalles respecto a los incumplimientos realizados por Villar de forma continua y se limita a destacar que «la FFIB durante un año ha solicitado una solución a esta situación y delante la pasividad de Villar ha decidido manifestar su protesta y no asistirá a la asamblea de hoy», comenta el comunicado.
Si bien el documento hecho público por los asambleistas de Balears no destaca los motivos concretos de su ausencia, esta redacción ha podido saber que las incursiones del ex presidente de la Federación Balear de Fútbol, Antonio Borrás del Barrio, son clave para entender el malestar del equipo que dirige Miquel Bestard. Borrás, desde su adiós, ha seguido vinculado a la Federación Española y su contacto con este organismo y con Angel María Villar es continuo. En reiteradas ocasiones se ha hecho saber al máximo responsable de la Española que esta situación no era deseable, pero Villar ha hecho hasta la fecha caso omiso a Bestard por lo que el enfado en la delegación balear ha ido creciendo hasta el punto que hoy los asambleistas no estarán en Madrid dando su apoyo a Villar que necesita del apoyo máximo para sacar la asamblea adelante y aprobar las cuentas.
Hasta la fecha, Balears siempre había sido una plaza fiel a Villar, pero esta situación ha sido la gota que ha colmado el vaso y pese a la amistad que une a los dos presidentes -Villar y Bestard- la asamblea de Balears está por encima y los integrantes de la misma no están dispuestos a seguir aguantando una situación que bajo su punto de vista es a todas luces injusta. Villar no se esperaba un rechazo tan unánime desde las Islas y ante esta situación no se sabe cómo puede obrar el responsable de la Española. Bestard espera que no haya represalias de tipo económico por parte de Villar tras conocer la medida tomada por el presidente de la Balear.