Fernando Fernández
En pleno proceso de confección de las plantillas, cierre de presupuestos y puesta en marcha de los futuros proyectos, los clubes deportivos de categoría nacional no esconden su preocupación ante el vacío que se ha generado tras las elecciones del pasado 27 de mayo. Amparados por el cada vez más ampuloso soporte económico de la Fundació Illesport, el cambio de color en el Consolat de Mar, la falta de respuestas por parte del Govern y el retraso en el pago de uno de los plazos fijados que denuncian algunas de las entidades afectadas han sembrado la duda entre los clubes deportivos del archipiélago, que aguardan al reparto de cargos para poder conocer quién se situará al frente de la Direcció General d'Esports y de Illesport, fuente de ingresos vital y cuyo futuro aporte está en el aire. Otro foco de tensión son los desplazamientos interislas, gratuitos, y por los que pugnarán a lo largo de la legislatura que arranca.
El nuevo inquilino de la gerencia de la Fundació recibirá una memoria de cada uno de los clubes en la que se desglosarán las categorías, gastos, presupuestos y demás criterios que dan opción a disfrutar de las ayudas. Algunos de ellos ya tienen sus plantillas casi cerradas (COP Crespí, Ícaro Alaró...), pero otros están a la espera de noticias para moverse y ven condicionados sus proyectos deportivos a la futura línea de actuación de Illesport.