El Mallorca ya tiene prácticamente diseñada la agenda de su pretemporada. El club balear, metido de lleno en la confección del ejercicio que viene, confirmó ayer la batería de encuentros con los que se tomará el pulso durante su estadía en el Tirol austríaco. El Olympiakos griego y otros tres sparrings locales de menor nivel pondrán a prueba la evolución de los hombres de Manzano a lo largo de la fase experimental del nuevo proyecto. Después, en el mes de agosto, el equipo volverá a la carga con una serie de enfrentamientos más exigentes que le ayudarán a subir un peldaño en la puesta a punto y a enfilar los primeros kilómetros de la Liga con las pilas totalmente cargadas.
De momento, el guión esbozado por Manzano va cobrando forma a un ritmo excelente. El hecho de que el Mallorca esté liberado de carga a falta de dos jornadas ha acelerado la confección de su próximo plan de viaje, al que le faltan sólo un par de flecos por concretar. En principio, el kilómetro cero se situará el lunes día 16 de julio en la ciudad deportiva de Son Bibiloni. La plantilla, a excepción de Jankovic -llegará dos días más tarde tras su participación en el Campeonato sub'21 con Serbia- y probablemente Arango y Jonás -se incorporará en función de su progresión en la Copa América-, se someterá a primera hora del día a las diferentes pruebas médicas y empezará a sudar al día siguiente con el látigo de los preparadores físicos.
Tras cinco días de intensos entrenamientos en Palma (día 21 de julio), el grupo cogerá los bártulos y se trasladará a Kössen, en pleno corazón europeo, para sentar los cimientos de la campaña. Permanecerá allí hasta el día 1 de agosto concentrado en el hotel Sonneck y volverá de nuevo al ruedo en medio de un paisaje idílico. Su primera función la interpretará el martes 24 ante el SC Mittersill, un modesto conjunto de la quinta división austriaca que le recibirá en su propio terreno de juego, ubicado a unos 58 kilómetros del cuartel general bermellón. Dos días más tarde, tendrá lugar el segundo encuentro, que medirá a los baleares ante el Tyrolean Team Unterland (un combinado compuesto por jugadores de la tercera y la cuarta división local) en el Sportcenter de Kössen, el lugar habitual de entrenamiento de los mallorquinista durante estage. La cita más importante está reservada para el 29 de julio en el Sportstadion de Jenbach, a 67 kilómetros del hotel de concentración mallorquinista. El Mallorca se enfrentará entonces al campeón de la liga griega, el Olympiakos, en el test más serio de su estancia tirolesa. Para cerrar el carrusel de amistosos, la escuadra rojilla jugará su último partido ante el FC Wacker Tirol de la Primera división austriaca.