Fernando Fernández
La temporada 2007 va camino de pulverizar todas las marcas dentro de la carrera personal por superarse que parece haber iniciado Jorge Lorenzo. En un inicio de campeonato, el piloto mallorquín del Fortuna Aprilia es más líder que nunca. Cuatro victorias (Losail, Jerez, Shanghai y Le Mans) y un segundo puesto (Istanbul Park) permiten al pupilo de Dani Amatriaín instalarse en la cúspide con un notable margen de maniobra. Jorge suma 120 de 125 puntos posibles, unos números de campeón que le permiten encarrilar la reválida de su corona.
Este registro es el mejor de la última década, ya que el único que se aproxima a Jorge es el japonés Daijiro Katoh, que en 2001, además de barrer a sus rivales y lograr la corona del cuarto de litro, fue capaz de imponerse en las cuatro primeras carreras (Suzuka, Phakisa, Jerez y Le Mans), pero no sumó en la quinta (Mugello). Nadie hasta la aparición en escena de Lorenzo ha sido capaz de ejercer esta hegemonía en el Mundial.
El caso más cercano que se asemeja al del balear de Aprilia es el de su ídolo. Max Biaggi, también a los mandos de un ingenio de la factoría de Noale, fue capaz de ganar en cinco (Sepang, Suzuka, Jerez, Mugello y Le Mans) de las seis primeras carreras, siendo segundo en Sentul (Indonesia). Todo para lograr una de sus cuatro coronas (1994 a 97) en la cilindrada.