Efe|MADRID
El Real Madrid recibe a un Espanyol, que piensa en la final de la Copa de UEFA, con el estado de optimismo más alto de la temporada, para la búsqueda del asalto del liderato, a la espera de la respuesta del Barcelona a su debacle copera.
La recuperación del Real Madrid llega a su punto álgido esta jornada. A expensas del Barcelona, líder a dos puntos de diferencia, la plantilla que dirige Fabio Capello prolonga en los dos últimos meses de campeonato liguero una trayectoria inmaculada. Desde la visita al Camp Nou y un empate que terminó de desperezar al Real Madrid, han conseguido seis victorias en siete partidos (18 de 21 puntos) y una sola derrota, en Santander, repleta de polémica por la actuación arbitral.
El estado de confianza madridista provoca que la plantilla enfoque con optimismo la lucha por la Liga, aún más si cabe tras la goleada copera del Getafe al Barcelona, con las esperanzas puestas en la visita que realizará el conjunto azulgrana al Atlético de Madrid el próximo fin de semana. Antes, llega el Espanyol al Bernabéu, y la moral local provoca que ni se hable de las importantes bajas por sanción de Beckham y Robinho. Higuaín y Guti, después de partido magistral ante el Sevilla, ocuparán su sitio, y la que se perfila como gran novedad del equipo titular, es la vuelta de Roberto Carlos. El Espanyol tendrá que aparcar durante noventa minutos la final de la Copa de la UEFA en Glasgow y concentrarse en el choque de Liga que disputa ante uno de los candidatos para llevarse el título de Liga. Con un encuentro tan importante como el del miércoles, Valverde reservará a varios de sus titulares. Futbolistas como Zabaleta, Jarque, Riera, Tamudo, Rufete, De la Peña o Moisés Hurtado descansarán para llegar frescos a la final de la UEFA.